A lo largo de la historia hemos visto como un sin fin de artistas deciden salir una o dos veces de su zona de confort para experimentar en otras áreas, algunos con éxito y otros no tanto. Al ser uno de los directores de cine más importantes de Hollywood, el trabajo de Quentin Tarantino ha influenciado de manera importante a otros medios de entretenimiento entre los cuales, obviamente se encuentran nuestros amados videojuegos.
Como parte de nuestros contenidos para celebrar el lanzamiento de The Hateful Eight, te presentamos una lista de siete juegos que claramente tomaron algunas ideas del trabajo de Tarantino para convertirlas en una experiencia interactiva, incluso para hacernos pensar en cómo sería si este cineasta decidiera hacer algo dentro de esta industria. Esperamos tus comentarios al respecto.
Todos los trabajos de Suda 51 tiene un toque muy especial, esto gracias a que toman elementos de diferentes obras, haciendo combinaciones verdaderamente extrañas. Kill Bill marcó a toda una generación de fanáticos del cine, por lo que las referencias a esta película se comenzaron a hacer en todos lados. Podríamos decir que No More Heroes es el videojuego no oficial de esta cinta que tanto aman por todo lo que presenta en pantalla.
Reservoir Dogs es para muchos la mejor película jamás hecha por Quentin Tarantino, con todo y que fue su primer trabajo importante. La manera en la que la cinta nos presenta cómo funcionan los robos, nos recuerda mucho a lo que vimos en Grand Theft Auto V y sus famosos heists, esto claro sin mencionar la gran cantidad de referencias que el juego de Rockstar hace a la cultura popular.
La violencia es uno de los elementos que más esencia y personalidad le dan a las películas de Quentin Tarantino, pues a lo largo de su historia, hemos visto un sin fin de momentos llenos de sangre que la verdad, nos encantan. Hotline Miami es un videojuego que se basa justamente en esto, por lo que nos recuerda a cosas como el final de Django Unchained o de Reservoir Dogs.
Cuando el Wii se lanzó hace ya casi una década, se nos prometieron un montón de cosas que serían posibles gracias al motion controller de la consola. Una de las primeras propuestas de este tipo fue Red Steel, el cual, a pesar de que nunca funcionó como se suponía, por momentos nos recordaba a algunas de las escenas de Kill Bill y hasta de Pulp Fiction.
Los westerns siempre han sido una de las especialidades de Quentin Tarantino. La manera en la que el director interpreta el género es verdaderamente sensacional, regalándonos grandes cintas como Django Unchained y más recientemente, The Hateful Eight. Hace unos años tuvimos la fortuna de disfrutar del más que sensacional Red Dead Redemption, obra maestra de Rockstar que evidentemente, nos recuerda mucho al trabajo de este cineasta.
Como te comentábamos hace unos párrafos, el famoso Suda 51 es uno de los diseñadores de videojuegos que más referencias hacen al trabajo de Quentin Tarantino. Si eres de los que vivió las épocas doradas del Gamecube y PlayStation 2, seguro recordarás un extraño experimento que llevó por nombre Killer7. Dejando un poco de lado el deficiente gameplay de este título, tenemos que aceptar que su estilo nos recordaba a cosas como Kill Bill, Reservoir Dogs, Pulp Fiction y muchas otras más de este director de cine.
Para muchos, simplemente no existe un periodo histórico más interesante que el de la Segunda Guerra Mundial. Debido a lo anterior hemos visto un sin fin de obras basadas en la época de este conflicto global, algunas de ellas sirviendo como sátira en realidades paralelas. Al igual que en Inglourious Basterds, Wolfenstein: The New Order nos cuenta la historia de un personaje nacido para matar nazis, esto claro, ubicado en una línea temporal que jamás ocurrió.