Jason Kingsley es el CEO de Rebellion —compañía que viene de varios tropiezos y tumbos con sus últimos juegos— y en entrevista para Gamerzines argumentó su disgusto con la reputación que su marca está obteniendo. “Nadie se propone hacer juegos malos” comentó, luego de admitir que las cosas no estaban resultando tan bien como le gustaría.
“Nadie en esta industria tiene como propósito hacer un juego malo; pero muchas veces, lo que tienes que hacer es un juego bajo circunstancias muy limitadas.”
Kingsley da a los críticos un punto a favor de tener la opinión que tengan, pero también dice que su compañía no ha tenido siempre la oportunidad de medirse bajo sus propios estándares.
“Tienes a gente diciendo cosas como -No hay excusa para hacer un juego mediocre- y su argumento es válido, supongo. Uno nunca apunta a hacer un juego malo; pero a veces no tienes el tiempo para hacer las cosas como tu quisieras, otras veces el juego tiene que salir antes de lo previsto. Si estás trabajando bajo contrato para algún gran desarrollador, así es como funciona.
Con suerte un día, al hacer una retrospectiva, podamos poner estas cosas en el pasado y dejarlas atrás. Por ahora, véamos hacía el futuro.”
Los últimos cuatro juegos en los que Rebellion ha trabajado son Shellshock 2, Rogue Warrior, Aliens vs Predator y NeverDead. ahora la marca se encuentra terminando Sniper Elite V2, el cual llegará a PC, PlayStation 3 y Xbox 360 este Mayo.
Vía: vg247
Fuente: Gamerzines