“Un héroe de la clase obrera hay que ser”
John Lennon
En el videojuego como medio se representan muchas personalidades de lo humano a través de sus personajes y en especial de los protagonistas. Esto es lo que le da riqueza a cada historia, aunque a veces parezca que en algunos el asunto de su actuar sea más bien forzado para llevarnos a cierta circunstancia.
Cuando conocemos a un nuevo héroe es común conocer el contexto de su historia personal, de manera que podamos empatizar con sus aspiraciones y circunstancias, y ya entrados en este afecto nos veamos representados en él de alguna forma.
En ocasiones parecería que los protagonistas están hechos mediante una estricta fórmula en la que el bueno es estrictamente puro y no tiene objetivo más allá de salvar al mundo o a la princesa. Esto no es revelador para nadie… tenemos casos donde el personaje principal de una saga lleva años haciendo el bien por hacerlo. En un principio esta narrativa resumida tenía un fondo relacionado con la tecnología: al tener poco procesamiento una máquina no nos daba para contar una historia extensa sin tener que sacrificar jugabilidad o aspectos audiovisuales, (sé que hay casos de clásicos que ya se tomaban el tiempo de desarrollar con complejidad a sus personajes, pero por las avenidas principales circulaban las historias simplificadas con mayor enfoque en las mecánicas de juego).
En la actualidad del diseño de videojuegos existe la capacidad para poder ahondar en las historias y presentarnos guiones complejos y llenos de matices, donde el bueno no es tan bueno sino que se mueve en una escala de grises, de manera que el extremo exclusivo ya no es tan común como antes. En este contexto, al igual que en otras formas de expresión humana, se ha creado al antihéroe, ése que por razones propias no quiere ser un todo-poderoso salvador del mundo y sin embargo, al final del día lo es. En este caso el protagonista pasa de una tendencia de un extremo a moverse por los matices y al final llegar al punto contrario, aunque sea por una secuencia en la que evita, o ayuda a evitar, que la catástrofe se dispare. Pero este no es el héroe paria del que quiero hablar: no sólo porque ha caído en una repetición constante que lo vulgariza, sino porque sería tema para tratar con toda dedicación en otro momento.
Gran parte de la historia personal de cada protagonista tiene una relación directa con su sociedad: Es él y sus circunstancias pues no está aislado de todo, sino que vive en una realidad compartida con sus semejantes. A veces se explica su estrato social y la repercusión que tiene en su forma de ser, así tenemos por ejemplo a Noctis que es un príncipe y se comporta como tal, porque si no tuviera que estar salvando una causa mayor, viviría como está predestinado: suceder el trono y ser relevante en su sociedad. En este último ejemplo vemos que la historia perdería un poco de sentido de no ser por una misión que va más allá de lo material.
Otro caso es el del fontanero más famoso del mundo, quien tiene como única razón para existir el rescatar a la princesa en apuros una y otra vez, aunque de vez en cuando se da licencia para manejar como un desquiciado en Mario Kart, pero bueno eso sería más un mundo paralelo al del canon de su historia. Así podemos enumerar a muchos héroes cuya única razón de existencia es el ser los salvadores de alguien o de todos.
Esta práctica de ser el mesías del mundo no está mal, que no se mal entienda mi punto, de vez en cuando es bueno sentirse el centro de la existencia, ser completamente indispensable para que todo suceda. Todo esto lo digo en el estricto sentido de las mecánicas de juego, no hablo de sentirse relevante como ser humano a través del juego, (que también sería otro tema, que más bien debería tratar un experto en la relación humano-fantasía y no yo).
Pero hay otro héroe, que como decía la canción de Lennon, proviene de la clase trabajadora. Que es un paria, a saber, está en el estrato social más bajo del mundo al que pertenece.
The Witcher 3 es una obra por demás interesante desde donde se le quiera ver: ambición de un mundo abierto, jugabilidad, gráficas, audio e historia, pero es en su personaje principal donde encontramos a este otro tipo de protagonista que por lo general es raro. Es irónico que en uno de los mundos de mayor fantasía se encuentre una de las representaciones humanas más apegada a la realidad, pues Geralt de Rivia es un tipo muy común en su existir. Quizás guarda estos aspectos desde su creación misma hecha por Andrzej Sapkowski, y es que se trata de un auténtico paria por donde se le vea: llega a las aldeas no con el fin último de hacer el bien sino por dinero. Así es, su trabajo consiste en hacer aquello que sabe como un profesional y luego ir a cobrar, aún cuando esto salve vidas, y es que como los médicos salvan vidas pero al final es un negocio y existe un interés desde el momento de su profesionalización.
De Rivia, como cua
lquiera que presta sus servicios, tiene que comer al final del día y aunque en algunas partes empatiza con la situación el pago es imprescindible. No hay nada más extraordinario que lo ordinario de su existir pues el tipo de vez en cuando se toma el tiempo para desahogar el día a día con un trago, es capaz de iniciar una pelea de taberna si se siente amenazado e incluso tiene un deseo sexual normal como cualquier otro ser. Además tiene una personalidad legítima pues las acciones que antes he mencionado no nos llevan a un cambio que al final lo convierte en el salvador y guardián de la tierra.
Geralt es un medio y no el fin último de la historia, en su andar aparece una de las cuestiones más humanas: el soñar, e igual que a cualquiera éste le persigue y lo pone a pensar. Todas estas características lo convierten en un personaje tan común como cualquier humano real, el cual presta su servicio en un trabajo.
Ahora sin más preámbulos hablemos de lo que hace de nuestro witcher un verdadero paria, y es que el desprecio de la sociedad es lo más característico de esta clase. Por definición sabemos que un paria es aquel que pertenece al estrato más bajo de una sociedad, por lo tanto el desprecio y maltrato al que son sometidos es evidente, es por eso que elegí la canción compuesta por Lennon en la que se explica el nacimiento trágico en la clase obrera y como el sometimiento comienza a notarse desde muy temprano en la vida. En este caso sentimos las miradas llenas de prejuicios en la carne de Geralt, por su propia naturaleza, que él de ninguna manera eligió, ha sido mal visto… es un bicho raro y despreciado por sus semejantes sólo por haber nacido en un contexto desfavorecido. Esto sin duda forja gran parte de la personalidad de De Rivia que se ve reflejada en el árbol de decisiones que podemos tomar, pues un aristócrata actuaría de otra manera… pero un paria hace lo que se debe hacer, cumple con el deber ser porque así ha sido educado.
Otro héroe paria podría ser Joel en The Last Of Us, pues sabemos que tiene un trabajo ilícito dentro de su realidad y la historia comienza con él viviendo su cotidianidad; en varias ocasiones demuestra que ve el inicio del viaje como un trabajo forzado para recuperar sus armas; son los distintos sucesos lo que lo cambian de un ente frío a una persona que es capaz de empatizar con otros y ver en Ellie a su propia hija. Esta es una clara diferencia con el protagonista anterior pues al final tiene una motivación superior… una especie de designio divino que le ayuda a obrar al final del día. Veamos, sí es un trabajador que se dedica a traficar con provisiones y armas y en su existir cobra por el trabajo laborado… pero hacia el final hay una voluntad mayor que lo hace modificar su estilo de vida. Esa fuerza que no le permite abandonar, en ningún sentido, a una adolescente desprotegida es tan desgarradora dentro de sí porque simboliza el amor fraternal.
Definitivamente esto último no hace cambiar el lugar de Joel dentro de la sociedad ficcional del juego, pero al final abandona su papel de mercenario, en el sentido de hacer todo por una paga, para dar paso a otra etapa de su existencia que es más inmaterial.
Dejando un poco de lado los títulos que son serios desde su argumento encontraremos a otro ente de la clase obrera donde menos lo pensaríamos… en Animal Crossing, pues nuestro personaje basa su existencia en el trabajo y en mantener el bienestar de los habitantes de su aldea. Esta obra puede ser juzgada desde la ideología política, por su parecido al comunismo y el materialismo. Al final de cuentas en esta colorida serie somos obreros de la causa común y nuestra misión es desvivirnos para la comunidad… que aquí se rompe un poco el esquema de trabajar para sí mismo, pero al fin y al cabo somos de una clase trabajadora que está dispuesta a entregar todo para el mejoramiento de una villa.
Como les comenté el ejemplo de Villager es un poco más complejo y digno de verse con más calma en otro momento, pues representa temas de ética, política y filosofía que no deberíamos tocar sin profundizar.
Yo voy a dejar esto aquí, con la convicción de que me cuenten que otro personaje es un héroe de la clase obrera.
