Aún recuerdo el último día del E3, tenía agentado una visita al booth de XSEED para probar Ivy The Kiwi, en lo que hacía tiempo para el Hands-on de este simpático juego, decidí hacer fila para probar el nuevo Zelda ¿Fila? Tenía ganas de tener la experiencia completa, no solo la de miembro de prensa.
Casi no llego a mi cita con XSEED, de no haber llegado, me habría perdido de la gran sorpresa.
Ivy the Kiwi es uno de esos juegos de los que no esperaba mucho, tal vez tengo que aceptar que este E3 no me sorprendí mucho, pero en el booth de XSEED me lleve por mucho LA sorpresa del E3.
En un pequeño booth al fondo del Convention Center se encontraban el booth, ahí adentro estaba para probar las dos versiones de Ivy The Kiwi, la de Wii y DS. Pero antes de entrar en todos los detalles, hay algo clave de este juego, su creador: Yuji Naka, por si de casualidad no sabes quién es, él es el creador de Sonic y por mucho uno de los desarrolladores japonés más importantes de la industria.
Sabiendo la anterior, Ivy the Kiwi, nos cuenta la historia de un pollito que se pierde y en busca de su mama tiene que cruzar varios puzles. Nada complicado en realidad, es simplemente un “point and click” donde Ivy camina sola y tú la vas guiando mediante lianas por los mapas.
Obviamente los niveles no son sencillos, la dificultad va aumentando mientras vas subiendo de nivel, le agregas enemigos y pequeños puzles y tienes un juego bastante interesante en tus manos. Las dos versiones se ven excelente, simplemente señalas y pones las lianas con el wiimote al igual que usas el stylus en el DS.
El estilo gráfico y su estética minimalista hacen que este juego se vea como un libro para niños, lo cual va muy acuerdo hacia el mercado al que va dirigido, pero ciertamente es un juego muy entretenido, para echar la reta en el avión o el camión.
