A pesar de que Trunks es uno de los mayores héroes en el universo de Dragon Ball, estuvo muy cerca de destruirlo durante su carrera en Dragon Ball GT, y Dragon Ball Super explica exactamente cómo sucedió esto. Trunks es el hijo mitad humano/mitad Saiyan de Bulma y Vegeta, que tuvo posiblemente la mejor introducción de cualquier personaje de Dragon Ball en la historia.
Originalmente, los fans fueron presentados a una versión de Trunks del futuro (denominado Trunks del Futuro) que era un misterioso guerrero que empuñaba una espada y que mató a Freezer como si nada. Si bien este nuevo personaje era sin duda impresionante, la mitología que lo rodeaba se volvió aún más emocionante cuando se reveló que ni siquiera era la versión de Trunks de la línea de tiempo principal de Dragon Ball, y que la versión principal todavía era un bebé que presumiblemente crecería para convertirse en un guerrero similar a lo que los fans obtuvieron con Trunks del Futuro.
Esto significaba que cuando el tiempo de Trunks del Futuro con los Z-Fighters había terminado, los fans todavía tenían la versión de la línea de tiempo principal del personaje para esperar, y esa emoción y anticipación se vio recompensada con Dragon Ball GT. En la temporada 1, episodio 22 de Dragon Ball GT (escrito por Aya Matsui, dirigido por Osamu Kasai, producido por Toei Animation), Trunks, Goku y Pan descubren una cámara oculta dentro del refugio del villano Dr. Myuu, una cámara que contenía al Machine Mutant más fuerte de Dragon Ball GT, conocido como Baby.
Baby es una entidad inmensamente poderosa con la fuerza para conquistar cualquier planeta conocido en existencia, básicamente convirtiéndolo en una amenaza para el universo. En este episodio, Baby era poco más que un feto artificial que crecía dentro de un tanque alimentado por computadoras y generadores. Cuando los Z-Fighters se enfrentaron cara a cara con el inconsciente Baby, Trunks reveló que ya había entrado en esta cámara antes y había subido un virus a la computadora que estaba diseñada para mantener a Baby con vida. Desafortunadamente, momentos después, Baby despertó, ya que resultó ser demasiado fuerte para el virus subido por Trunks, o simplemente Trunks no hizo bien su trabajo.
Basado en la línea de tiempo oficial de Dragon Ball, Dragon Ball Super tiene lugar entre Dragon Ball Z (inmediatamente después de la batalla de Goku con Majin Buu) y Dragon Ball GT (que tiene lugar cinco años después del salto temporal de diez años de Dragon Ball Z). Esto significa que todo lo que sucede en Super es solo un precursor de lo que sucederá en GT, incluida una explicación sobre por qué el asalto de Trunks a Baby no funcionó.
En el capítulo 88 de Dragon Ball Super de Akira Toriyama y Toyotarou, Trunks (la versión de la línea de tiempo principal) y Goten son adolescentes que decidieron comprometerse a ser superhéroes. Cuando Goten recibe noticias de un cibercriminal y quiere entrar en acción, Trunks rechaza la misión porque suena demasiado aburrida y no requiere acción física. Goten reconoce que los sentimientos de Trunks hacia esa misión tienen sentido, señalando que Trunks no es bueno con las computadoras.
Dragon Ball Super confirma que Trunks no es bueno con las computadoras, sin embargo, solo unos pocos años después, la misma versión del personaje intenta detener quizás el ser más peligroso del universo a través del uso de una computadora.
Trunks podría haber simplemente disparado contra el tanque de Baby como hizo Future Trunks con Cell en DBZ, pero en cambio intentó detener a Baby a través de sus habilidades aparentemente inexistentes en informática. No es de extrañar que el virus no haya matado a Baby, probablemente Trunks ni siquiera lo haya subido correctamente si la información dada en Super es creíble.
Esto significa que, debido a que Trunks es malo con las computadoras como se establece en Dragon Ball Super, su misión de matar a Baby a través de un virus informático falló, lo que puso en peligro la totalidad del universo de Dragon Ball GT.
Vía: Screen Rant
