Son evidentes las mejoras significativas cada vez que Oculus presenta un nuevo modelo de Rift. El año pasado, se introdujo una versión temprana de este dispositivo de realidad virtual, misma que era exclusiva para desarrolladores. Después de una fuerte inversión de 75 millones de dólares, era inevitable ver un progreso agigantado del producto.
En el CES de este año, bastantes mejoras fueron presentadas en el nuevo prototipo de Rift, conocido como Crystal Cove. Entre ellas está la pantalla a 1080p, una reducción de la velocidad de latencia a menos de 30 milisegundos (lo que reduce sustancialmente el retraso), una pantalla AMOLED, y la reducción del efecto ‘motion blur’ que puede provocar mareos en el usuario.
Crystal Cove fue presentado con dos demos, ambos diseñados por Epic Games con Unreal Engine. La nueva característica que más llamó la atención fue la nueva cámara externa que agrega el elemento de espacio en tres dimensiones al funcionamiento de Rift. Con ella es posible realizar movimientos con el cuerpo hacia adelante, atrás, o los lados, afectando directamente el rendimiento del juego y nuestra inmersión en él.
Sin duda un gran avance por parte de Oculus, quien se llevó las palmas en su reciente conferencia. Por lo pronto, el CEO Brendan Iribe anuncia que no tienen prisa por lanzarlo, ya que quieren entregar un producto final de calidad que satisfaga las expectativas del consumidor.
Aqui en Atomix ya le dimos una probada al prototipo de Oculus Rift, y nos pareció una propuesta muy interesante, ¿ustedes que piensan?, ¿lo esperan?
Fuente: Wired
