Después de la segunda entrega, esta querida saga perdió algo de credibilidad gracias a decisiones de diseño erróneas que estaban muy atadas al tema comercial. Para nuestra fortuna, las mentes maestras de BioWare decidieron retomar camino con Dragon Age: Inquisition, título que se levanta como el principal bastión del diseño moderno occidental de RPGs, el cual, brilla de manera intensa en casi todos sus apartados. Por tal motivo, nos dimos a la tarea de enlistar las razones por las que esta maravillosa obra de fantasía medieval, merece tu atención.
Una de las partes más importantes de todo RPG, es la historia bajo la cual se desenvuelve todo el juego. Inquisition cumple de manera magistral en este sentido, pues nos narra eventos verdaderamente épicos en los que los giros inesperados están a la orden del día, esto sin mencionar la complejidad política y racial que se vive en las fantásticas tierras que visitamos.
La cantidad de contenido en esta entrega de Dragon Age es verdaderamente abrumante. El número de side quests por hacer parece interminable. Por supuesto que la cantidad no es sinónimo de calidad, no obstante, este título hace que hasta la actividad más simple se sientan relevante, esto gracias a lo bien pensadas que están cada una de ellas y por supuesto, a que prácticamente todas te dan muy buenas recompensas. Espera gastar cientos de horas haciendo toda clase de cosas, desde ir a detener una jauría de lobos que aterroriza a una villa, hasta encontrarte en medio de una batalla entre un gigante y un dragón.
Sin lugar a dudas, uno de los puntos más fuertes que tiene Inquisition es lo increíblemente divertido que es estar recorriendo sus hermosas e inmerisvas zonas. Perderte en un inmenso bosque o en las minas de un cálido desierto, simplemente no tiene igual. Qué importan cumplir con nuestro objetivo principal si nos podemos adentrar en una cascada para después encontrar un cofre con una espada o escudo especial. Cada una de las áreas que visitamos se siente única, y por más que caminas y caminas, nada se siente genérico o fuera de lugar. Un diseño de niveles impecable.
Una de las principales quejas que se dieron en Dragon Age 2 fue que estaba casi completamente enfocado al combate. Dicho punto fue refinado de manera importante en esta entrega de la querida serie. Además de conservar todo lo aprendido en las ediciones anteriores, se agregó la cámara táctica que nos recuerda a los RPG clásicos de BioWare, asunto que brinda mucha profundidad al cómo nos aproximamos a cada enfrentamiento.
Hablando de profundidad, el nivel al que puedes personalizar tu personaje y party, es verdaderamente considerable, esto sin mencionar el ingenioso árbol de habilidades y sistema de creación de armas y armaduras, el cual, incentiva a que el jugador experimente de una y mil maneras con las herramientas que quiera tener a la mano cuando sea momento de la verdad.
Por supuesto que una aventura creada por BioWare no podría quedar completa sin personajes que se sientan reales y por los cuales sientas cariño autentico. Inquisition nos presenta seres por demás interesantes con pasados dignos de un juego propio, los cuales, se ganarán tu respeto o tu odio. Sí, me atrevo a decir que la profundidad de los personajes en este Dragon Age, se equipara a lo que vimos en los fantásticos Mass Effect. ¿Alguien dijo Iron Bull?.
Tomar decisiones se ha convertido en uno de los pilares de los juegos creados por BioWare. A pesar de que en Inquisition, las determinaciones que tomamos no tienen tanto impacto directo como lo presentando en Mass Effect, la realidad es que se siguen sintiendo muy relevantes. Durante las primeras 15 horas de juego, se nos pone enfrente una decisión que cambia por completo el destino de toda la experiencia, esto sin mencionar el hecho de que como inquisidores, podemos juzgar a los criminales de nuestra comunidad, eventos en los que tu moralidad es puesta a prueba de manera importante.
Puede que iniciar con un RPG de estas dimensiones sea abrumante y hasta intimidante para cualquiera que no esté familiarizado con el género, y a pesar de que Inquisition es poco amigable para presentar la enorme cantidad de contenido, la realidad es que después de las primeras horas de juego, cada quien puede tomar el ritmo que le convenga. El título se ajusta de manera perfecta si solo quieres dedicarte a hacer las misiones principales, si quieres completar absolutamente todo o si es que lo tuyo es ligar.
Si el juego se llama Dragon Age, deben aparecer dragones ¿no?. De primera instancia, si alguien busca un juego de cazar estas bestias mitológicas, puede que se lleve una gran decepción, pues en Inquisition, los dragones son escasos, punto que podría parecer negativo, sin embargo, es todo lo contrario. Lo anterior lo digo porque la escasez, los convierte en algo muy especial. Tener un encuentro con cualquiera de ellos se siente diferente y épico, y cuando entiendes cómo funciona todo el sistema, el título gira hacia algo que muy pocos se imaginaban.
Esperamos que todas estas razones te sirvan para decidir de una vez por todas si es que Dragon Age Inquisition merece cientos de horas de tu tiempo. De lo que sí estamos seguros, es que BioWare lo volvió a hacer para fortuna de todos sus fanáticos. Cuéntanos, ¿ya estas jugando este maravilloso RPG?. Si es así, ¿qué consejo le darías a alguien que apenas le va a entrar.
REVIEW: DRAGON AGE: INQUISITION
