Aunque las ventas de Xbox One son positivas en términos generales, no nos sorprende que haya números negativos por un clima de malos entendidos que rodearon el lanzamiento de esta plataforma de Microsoft. Se reporta que a pesar de las ganancias y los positivos reportes mensuales que indican un crecimiento favorable en el número de consolas vendidas, los gastos de su producción y lanzamiento fueron mayores, y no se han podido recuperar de esa inversión.
Un reporte reciente revela que las ventas totales de la nueva consola de Microsoft representan ganancias de aproximadamente $1,700 millones de dólares, lo que no fue suficiente para recuperarse de los millones de dólares invertidos el lanzamiento, publicidad y producción de la consola.
De esta manera, se reportan pérdidas de aproximadamente $400 millones de dólares, cifra importante que se espera contrarrestar con los lanzamientos que quedan en el año en la nueva consola de Microsoft que gradualmente espera alcanzar las ventas de su competidor, el PS4.
Fuente: TheIndependent, vía Gamerheadlines