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Bandai Namco
Bandai Namco
13/09/2016
En la actualidad hay incontables ejemplos de videojuegos que han “maltratado”, por así decirlo, personajes y franquicias que hace unas décadas fueron emblema de la industria de los videojuegos, afortunadamente es bueno saber que ese no es el caso de Pac-Man, todo un ícono de la industria que incluso aparece como referencia en una gran cantidad de productos de sus propietarios, Bandai Namco.
Aunque este personaje amarillo ha tenido adaptaciones a mundos tridimensionales y hasta series de animación que buscan nuevos públicos para mi es bastante agradable que sus propietarios sigan atendiendo al público que espera de Pac-Man seguir corriendo en pasillos comiendo píldoras perseguidos por fantasmas hasta el momento en que tenemos el poder de perseguirlos a ellos.
Hay varios ejemplos de cómo Bandai Namco nos sigue atendiendo con buenos juegos de Pac-Man, por mencionar algunos, hace poco se nos entregó en consolas caseras el éxito de los dispositivos móviles Pac-Man 256, desarrollado por los creadores del popular Crossy Road, que nos coloca en un laberinto infinito para buscar nuestro mejor récord. Ahora que si lo que ustedes están buscando es una experiencia todavía más profunda con la serie también tenemos la serie Campionship de los estudios de Bandai Namco en Tokio que ya desde Pac-Man Championship Edition DX nos entregaron el mejor formato de un juego que después de 36 años se sigue sintiendo fresco y divertido.
El mes pasado se estrenó la nueva entrega de la serie Championship y puedo decirles que me sorprende la manera que en que Pac-Man sigue evolucionando a más de tres décadas de su surgimiento y la fórmula sigue siendo igual de adictiva y divertida que siempre. Se los dice alguien que ama y es adicto a este tipo de experiencias arcade, deben jugar Pac-Man Championship Edition 2 si lo suyo es seguir este género.
Al igual que el primer juego de esta serie, el gameplay consiste en limpiar pasillos comiendo puntos sin ser alcanzado por los fantasmas pero en un formato muy rápido en el que podemos decir que juegas niveles exprés uno tras otro al conseguir cierto objetivo. Una primer diferencia con el pasado Championship está en que mientras que en el anterior tenías que limpiar por completo todos los puntos de cada laberitno en este caso puedes adelantar niveles al comer la fruta que aparece al llegar a cierto número de puntos comidos.
Quizá el objeto más importante entre las novedades del juego es una bomba que al pulsar un botón te hará saltar a donde iniciaste tu recorrido por los pasillos del escenario donde se encontrará la fruta que aparece luego de comer lo suficiente como les comentábamos anteriormente. Ya que estamos hablando de saltos, otra de las novedades interesantes es un nuevo elemento dentro del escenario que son una serie de resortes que te hacen saltar de un lado del escenario a otro como parte de la dinámica, conviene señalar que como en todos los Pac-Man hay manera de devorar todas las píldoras en una sola línea de forma continua, lo que es completamente recomendable para que en el tiempo disponible en cada nivel alcances a hacer la mayor cantidad de puntos que te garanticen un lugar en la tabla de líderes.
Otra novedad que sorprenderá a los veteranos de la serie es que por primera vez pedes tocar a los fantasmas sin consecuencias fatales, algo que puede sonar muy extraño pero que sobre la práctica agrega un nuevo nivel de profundidad a las mecánicas clásicas de Pac-Man. ¿Cómo funciona lo anterior? Básicamente los fantasmas y su ejército de sombras que despiertas por todo el escenario al recorrer los pasillos para que vayan formando trenes de enemigos, tienen un estado relajado natural pero después de tres toques seguidos pasan al estado alterado en el que comenzarán la persecución, caso en el que entonces ahora sí cualquier roce es letal. Esta nueva mecánica genera nuevas estrategias pues al cambiar de estado relajado a alterado el tren de enemigos en cuestión salta por los aires, es posible entonces que los provoques de forma intencional para pasar por debajo de ellos en pasillos estrechos en los que te quedan pocas opciones, o en otro caso es posible frenar por completo para evitar toques por mencionar sólo un par de ejemplos.
Entre las mecánicas más interesantes que están de regreso tenemos el Chain Eating que consiste en la venganza que tomarás por ser perseguido cuando después de ingerir un Power Pill es momento de comer todos esos molestos fantasmas y sus sombras; aunque su forma de funcionar es muy similar a la que vimos en Championship DX tiene el cambio que los trenes de rivales seguirán rutas específicas marcadas sobre el laberinto que te darán una pista para comerlos pues las puntuaciones siguen encadenándose entre más larga sea la fila de fantasmas comidos y más cadenas seguidas puedas devorar.
Mencionado lo anterior puedo decirles que en esencia, Championship 2 tiene ese modo frenético de jugar de niveles seguidos donde cada reflejo en las vueltas es la única clave para no morir y conseguir los marcadores más altos, por otro lado, los cambios sutiles como la introducción de bombas, la ya no necesaria limpia de todo el escenario y poder tocar a los fantasmas pocas veces antes de que se enojen como parte de la estrategia son mecánicas que nos ofrecen un juego que se siente muy diferente pero no por ello menos frenético y divertido.
Ahora bien, otro elemento importante en el juego son sus diferentes modos y aunque en esencia todo obedece las mismas reglas que ya hemos descrito de manera breve más arriba, tenemos varias formas de jugar que conviene mencionar.
El modo principal del juego podría ser el ataque de puntuaciones que nos pone en “playlist” de niveles prediseñados a competir con la variable de tres niveles de dificultad que incrementan el número de fantasmas y la velocidad. El objetivo es, como su nombre lo indica, hacer la mayor cantidad de puntos en el tiempo determinado o hasta que se agoten tus vidas.
Otro modo de juego es una campaña que de igual forma nos coloca en niveles prediseñados que se juegan con las mismas mecánicas del modo anterior aunque con la diferencia que en lugar de ser infinito hasta que el tiempo se agote, tiene objetivos precisos de terminar cierta cantidad de rondas para poder considerar la fase como completada; luego de varios niveles incluso se presenta una batalla contra un jefe en la que un ataque encadenado a los fantasmas que te persiguen serán la única manera de vencer a una sombra gigante que aparece en el fondo de la pantalla.
Al final del día el principal motivante para seguir jugando es vencer tus puntuaciones y conseguir la más alta calificación en el caso de los objetivos preestablecidos en el Score Attack o la cantidad de estrellas dentro de la campaña.
Es bueno ver que Championship 2 sigue la línea de la presentación del juego predecesor con laberintos neón sobre fondos animados obscuros, están de regreso montones de skins para el juego y también un soundtrack bastante adecuado al frenesí de esta nueva manera de presentar Pac-Man.
El juego incluye gráficos tridimensionales y aunque en un principio me daba miedo que fueran a alterar la presentación retro del juego la verdad es que aportan más que causar realmente una afectación grave al estilo del juego.
Fuera de lo anterior es poco lo que puede decirse de Pac-Man Championship 2, una experiencia pura de mecánicas de juego y ataque de puntuaciones que sorprende cuando más de tres décadas después de la llegada original del juego sigue superándose e innovando para seguir siendo igual de frenético y divertido que siempre, un juego realmente único en su género que nunca ha sido igualado.
Pese a que la mayoría que hemos dicho de Championship 2 son cosas positivas tampoco podemos dejarlo libre de errores pues en primer lugar es una experiencia bastante sencilla y aunque nos agradaron en términos generales sus novedades pudo haber sido mucho más brillante y revolucionario en sus cambios para poder alabarlo quizá como el mejor Pac-Man contemporáneo; aún así, es una recomendación segura, quien quiera perderse en su sencilla pero divertida fórmula tiene diversión asegurada a un precio no tan elevado.
Ampliamente recomendable.