El reporte de The Wall Street Journal en donde se revelaron acusaciones en contra de Bobby Kotick, CEO de Activision Blizzard, también ha mencionado que Jennifer Oneal, quien se convirtió en co-directora de Blizzard tras la salida de J. Allen Brack el pasado mes de agosto, y quien renunció a este puesto a principios de noviembre, culminó su relación con esta empresa al ser “una representación simbólica, marginada y discriminada”.
De acuerdo The Wall Street Journal, quienes tuvieron acceso a correos entre Oneal y los directivos, la ex-codirectora de Blizzard “profesó una falta de fe en el liderazgo de Activision para cambiar la cultura [laboral]” Junto a esto, también se reveló que Oneal fue acosada al inicio de su carrera. Por si fuera poco, se señaló que al subir de puesto, no recibió una paga igualitaria a la de Mike Ybarra, el otro co-director.
Al darse a conocer esta información, Activision Blizzard emitió un comunicado en donde señalan que a Oneal sí se le ofreció una paga igualitaria por su último puesto. Sin embargo, IGN, quienes aseguran haber visto correos y conversaciones entre los dos co-directores, ha señalado que a Oneal se le ofreció una remuneración similar a la de Ybarra solamente cuando externó sus deseos de abandonar la compañía.
De acuerdo con IGN, esto fue lo que comentó Oneal al respecto:
“Cuando Mike y yo fuimos colocados en el mismo rol de co-directores, asumimos el rol con nuestra compensación anterior, que no era equivalente. Permaneció así durante algún tiempo, mucho después de que hicimos varias solicitudes rechazadas para cambiarlo a paridad. Si bien la empresa me informó antes de presentar mi renuncia que estaban trabajando en una nueva propuesta, solo nos hicieron ofertas equivalentes después de que presenté esa renuncia”.
Jennifer Oneal señala que su posición como co-directora solamente fue una forma de representación simbólica. A principios de este mes de noviembre, la ejecutiva abandonó su puesto, y por el momento se desconoce cuál será su siguiente paso en esta industria. En temas relacionados, accionistas también quieren que Bobby Kotick renuncie.
Nota del Editor:
Es una lástima que Oneal fuera tratada de esta forma. Al ser una mujer de descendencia asiática y parte de la comunidad LGBT, los ejecutivos de Activision Blizzard seguramente pensaron que llevarla a un nuevo puesto sería suficiente para demostrar su compromiso con ofrecer un ambiente laboral seguro, pero este no fue el caso.
Vía: Kotaku
