Sin lugar a dudas, Metal Gear Solid es una de la sagas más amadas de toda la industria, esto a pesar de que contrario a lo que se piensa, sus juegos no son de lo más vendido de la historia. A lo largo de sus múltiples entregas canónicas y no canónicas, hemos tenido la oportunidad de enfrentar a varios villanos que se han convertido en auténticos iconos gracias a su maravilloso diseño.
Este jueves 13 de julio, todos los fanáticos de Metal Gear estamos de fiesta, pues se están cumpliendo 30 años de que Hideo Kojima y Konami lanzaron ese juego para la MSX2 que inició con la leyenda. Por tal motivo, nos dimos a la tarea de elegir a los cinco jefes más memorables a los que Snake y Big Boss han tenido que enfrentar.
Esta lista simplemente no podía comenzar con otro personaje. Si de villanos con exceso de personalidad y relevancia en la historia de un juego hablamos, el nombre de Revolver Ocelot brinca de manera inmediata. Este maestro de las pistolas de mano es uno de los más recordados de todo Metal Gear Solid, sobre todo por la maravillosa batalla que sostenemos con él en la entrega lanzada para PlayStation en 1998.
Además de lo anterior, el famoso Ocelot es uno de los personajes con más relevancia, pues tiene relación directa con prácticamente todos los miembros de la familia de Snake. Su papel en Metal Gear Solid 3: Snake Eater, así como el épico final que tuvo en Metal Gear Solid 4: Guns of the Patriots, lo convierten en uno de los villanos que más recordamos de toda esta maravillosa serie.
Sin temor a equivocarnos, podemos decir que el primer Metal Gear Solid de 1998, es uno de los juegos que dejó una de las huellas más importantes en la historia de esto que tanto amamos. Lo anterior se dio gracias a diferentes aspectos, principalmente a su maravillosa historia forjada por personajes que se quedaron en nuestra memoria para siempre. Cada vez que nos tocaba enfrentar a uno de los jefes que habitaban Shadow Moses, varios sentíamos que la piel nos explotaría de la emoción, asunto que se acentuó cuando Psycho Mantis salió al ruedo.
Este ex agente de FOXHOUND que usa una mascara de gas para forzar que sus víctimas entren en su mente, fue utilizado por Hideo Kojima para tocar la cuarta pared como nunca antes lo habíamos visto. Durante el combate, este maestro de las artes psíquicas tenía la habilidad de alterar nuestros controles, forzando a que tuviéramos que cambiar de slot el mando de nuestra consola, esto sin mencionar que leía la memory card que tuviéramos conectada, haciendo referencia a nuestros juegos pasados; una autentica maravilla. Mención honorífica al fan service que vimos en la cuarta entrega.
Si la opinión pública mandara, podríamos decir que Metal Gear Solid 3: Snake Eater, es el mejor de toda la saga. Dicho juego dejaba de lado un poco la profunda y complicada historia que vimos en Sons of Liberty, para tener una aproximación mucho más al estilo de Hollywood para que fuera más accesible a un mayor número de personas. A pesar de que esto podría sonar como algo negativo para la obra de Hideo Kojima, la realidad es que el resultado fue más que sobresaliente en casi todo sentido, entregándonos un título sólido y perfectamente logrado en cada uno de sus aspectos.
Por supuesto que los jefes que vimos a lo largo de nuestra aventura por la selva, fueron uno de los puntos más destacables de todo el juego, pues se notó de manera importante el gran cariño con el que fue construido cada uno de ellos. A pesar lo maravillosos que son The Fury, The Sorrow, The Fear o el mismo The Pain, la realidad es que si de algo nos acordamos, es de la épica batalla que libramos con The End. Este veterano francotirador utilizaba el maravilloso diseño de niveles a su favor, pero en caso de que no pudieras con él, tan solo debías esperar un par de horas para que muriera de viejo. ¡Vaya detalle!.
Quizá uno de los personajes más extraños de Metal Gear Solid 2: Sons of Liberty es Vamp, un súper humano de Rumania que pertenece al grupo Dead Cell. Una serie de nanomáquinas que corren dentro de su cuerpo provocan que este peculiar personaje repela los disparos y tenga habilidades como la súper velocidad que lo hacen correr sobre el agua.
Con sus dientes afilados parecería que su nombre se debe a que se trata de un vampiro no obstante dentro del juego supimos que más bien se refiere a que es un personaje bisexual que originalmente había sido diseñado como una mujer pero al final se convirtió en Vamp como lo conocemos.
Su gusto por la sangre humana lo tomó de su propia familia, cuando tuvo que alimentarse de ellos para sobrevivir de una explosión. Muchos de sus movimientos se inspiraron en el bailarín Joaquín Cortés.
Aprendimos a odiarlo cuando con sus escurridizos movimientos se nos escapó en varias ocasiones de Raiden en Sons of Liberty.Las batallas del primer Metal Gear Solid son de las más recordadas de toda la saga, pues fueron parte esencial de toda la revolución que significó el título lanzado originalmente para PlayStation. Entre todos los maravillosos jefes a los que Snake se enfrentaba, estaba la bella y muy letal Sniper Wolf, una francotiradora iraquí con un pasado verdaderamente trágico que la convertía en uno de los elementos más interesantes de todo el juego.
Las batallas del primer Metal Gear Solid son de las más recordadas de toda la saga, pues fueron parte esencial de toda la revolución que significó el título lanzado originalmente para PlayStation. Entre todos los maravillosos jefes a los que Snake se enfrentaba, estaba la bella y muy letal Sniper Wolf, una francotiradora iraquí con un pasado verdaderamente trágico que la convertía en uno de los elementos más interesantes de todo el juego.
Antes de entrar a la batalla y con el objetivo de adentrarnos en el territorio de nuestra enemiga sin ser detectados, Snake tenía que hacer el sacrificio de dejar que un par de lobos orinaran su caja escondite. Después de hacer tan peculiar actividad, comenzaba la increíble lucha de disparos a larga distancia. Sin lugar a dudas, el terminar con la vida de este maravilloso personaje es uno de los momentos más tristes de esta industria.
De esta manera terminamos de recordar los que para nosotros, son los cinco jefes más épicos de todo Metal Gear Solid. Esperamos que hayas disfrutado de este viaje al pasado y que nos cuentes: ¿cuál de todos ellos es tu favorito?, ¿qué otro crees que hubiera merecido entrar en la lista?, ¿crees que algún día Konami ahora sin Kojima si anime a sacar otro juego hecho y derecho de la saga?.
Bonus
Fundadora de la Cobra Unit, madre biológica de Ocelot y mentora de Naked Snake, The Boss es uno de los personajes más imponentes de todo el lore de Metal Gear Solid. El primer encuentro que tenemos con ella es uno de los más memorables, esto por la forma en la que un abrir y cerrar de ojos, deja a Snake hecho pedazos. Claro que sabíamos que en algún momento podríamos cobrar venganza. Luego de saber cuál es su verdadera identidad, así como intenciones y ambiciones, llega el momento de uno de los combates más recordados en toda la historia de la saga. Ese setting lleno de flores y el dramatismo que sólo Kojima le puede imprimir a sus personajes, hicieron de este momento uno que se quedó con nosotros para siempre.
