Desde hace algunos años en México se ha implementado una ley en el que los productos consumibles tienen que contar con sellos en los que se establezca si dicha comida lleva consigo cantidades excesivas de algún ingrediente, ya sea sodio, azucares o grasas saturadas. Pero eso no fue todo, dado que se tomó la decisión de exigir a los proveedores que quitaran dibujos animados de los empaques, todo con el fin de no generar en los niños a consumir alimento chatarra, y los más grandes afectos ahí fueron los cereales.
Las icónicas mascotas de los cereales están regresando a los empaques tras haber sido retiradas en 2020 debido a las reformas a la NOM 051, que establecían restricciones en la publicidad de productos con exceso de azúcares y calorías dirigidos a los niños. Estas obligaban a los fabricantes a remover personajes infantiles y otros elementos atractivos si sus productos contenían sellos de advertencia nutrimental. Ahora, bajo ciertas condiciones y reformulaciones, los personajes pueden volver a los empaques de cereales con menos azúcar y calorías.
Un ejemplo claro es la marca Nesquick, que ha recuperado a su conejo, pero solo en su versión de cereal “Nesquick Letritas”, que tiene un contenido reducido de azúcares añadidos. La versión original, sin embargo, sigue exhibiendo los sellos debido a sus altos niveles de azúcar. Este enfoque de crear nuevas fórmulas con menos azúcar es también adoptado por otras marcas como Kellogg’s, que ha relanzado a su personaje Melvin en la versión “Chocokrispis Pop”, también con un menor contenido calórico.
Otra línea que ha aprovechado este cambio es “Krunchers” de Kellogg’s, con versiones de Froot Loops, Zucaritas y Chocokrispis que ahora muestran sus personajes en los empaques gracias a sus nuevas formulaciones. En el caso de Chocokrispis, por ejemplo, la nueva versión redujo el azúcar añadido de 30 gramos a solo 3.5 gramos. Esta estrategia de reformular productos permite que las marcas cumplan con la normativa y, al mismo tiempo, mantengan su atractivo hacia los consumidores más jóvenes.
Este regreso de personajes a los empaques busca equilibrar la normativa de salud con las estrategias comerciales. Sin embargo, es importante destacar que las versiones originales de estos cereales aún existen y continúan mostrando los sellos de advertencia, por lo que los consumidores deben estar atentos a las diferencias entre las versiones originales y las cambiadas.
Vía: NESS
Nota del autor: A pesar de estos métodos, la gente sigue consumiendo cereales al por mayor, por lo que deberían regresarlos sin problema. Habrá que ver si en algún momento deciden ceder.
