En Corea hubo algunas protestas por la falta de parecido que Juri tiene con la gente de su país de origen. Pero no importa, todos sabemos que el diseño de los personajes obedece a muchos factores adicionales a intentar ser políticamente correcto. Y si ustedes también se hicieron fans de esta chica, la compañía SOTA Toys les ha preparado una sorpresita.
Juri se ve loca, mala y genial. Comparto la opinión con los de TOMOPOP: al juguete le falta esa expresión de maldad exacerbada. Juzguen ustedes mismos:
Y aquí tenemos el modelo sin pintar. Yo le pondría algún efecto chido en su ojo biónico:
Les recomiendo que revisen el Facebook de la compañía, pues tienen cosas muy interesantes que intentarán importar a toda costa, ya verán.
Aunque no comparto el gusto obsesivo por los muñecos que otras personas tienen, siempre me ha parecido fascinante la necesidad que tenemos de recrear nuestros cuerpos, de exteriorizar lo que percibimos inmediatamente. Muchos podrían pensar que su cuerpo es lo más suyo que tienen; sin embargo, Schopenhauer les diría: jamás percibimos directamente nuestras manos, ni nuestros ojos, siempre lo hacemos a través de algo más. En cierto sentido, somos cerebros sintiendo el mundo, ¿hay un alma oculta en esa red infinita de conexiones neuronales? Tal vez el arte o la religión tienen la respuesta.
Si se quedaron clavados, no pueden perderse las películas de Ghost in The Shell (las dos son excelentes). ¡¡¡Motokooooo!!!
Fuente: TOMOPOP.
