Seamos sinceros: podemos nombrar muy pocos juegos de mundo abierto que no tengan conexión alguna con los trabajos de Rockstar Games o Bethesda. Los reyes de los mundos abiertos han inspirado a muchísimos desarrolladores. Jamie Keen, diseñador líder de Far Cry 3, habló al respecto de lo que quiere lograr con el título.
La idea es mantener a los jugadores interesados en el mundo. Después de todo, son territorios enormes que, sin los incentivos suficientes, parecerán grandes masas inertes de tierra. La clave, según Keen, es evitar la repetición. En este sentido, quieren separarse un poco de títulos como Skyrim con sus NPCs que siempre te dicen lo mismo. Por lo anterior, también buscará que el mapa de Far Cry 3 sea complejo, pues quieren que la gente desee explorar el terreno.
A fin de cuentas, todos estos son elementos que definen el éxito de un mundo abierto. Minecraft, por ejemplo, es un juego prácticamente infinito y que se genera a medida que lo recorres: caminar es crear nuevo mundo y expandirlo. Títulos como Red Dead tienen su propia fauna y flora y parecen tan vastos que no te los acabarías en una vida. Éste es el objetivo final: crear un mundo que se sienta vivo y tangible.
Por lo que ustedes han visto, ¿creen que lo logren con Far Cry 3?
Fuente: Eurogamer.
