Naruto tuvo uno de sus mejores momentos como Hokage en el capítulo 46 de Boruto. Luego de ser engañados por unos trúhanes, la villa de Konoha necesitaba de un líder y el Hokage usó su habilidad retórica para animar a su gente y demostrarnos cómo se es un digno gobernante. Pero Naruto tiene más características para sorprendernos.
Spoilers posibles enseguida.
La pandilla Byakuya llevaba haciendo muchas maldades y parecía que se iba a salir con la suya; su jefe, Gekko incluso traicionó a los suyos con tal de escapar. El bandito también logró librarse de Boruto y Shikadai mientras ellos luchaban contra Ryogi, pero no contaba con el poder de Naruto.
Justo cuando el malvado parecía haberse salido con la suya, el Hokage de Konoha llegó a escena en un abrir y cerrar de ojos. Y como pudieron ver, no tuvo que esforzarse demasiado para detener a Gekko.