Nos encontramos en medio de una autentica fiesta, pues hace 60 años se abrieron las puertas de Disneyland en Anaheim, California, el llamado lugar más feliz de la tierra. Aprovechando la ocasión, Atomix se ha unido a los festejos con la #DisneyWeek. Nuestros contenidos especiales relacionados a este mundo lleno de magia no podían comenzar de otra manera que no fuera recordando el gigantesco legado que esta marca ha dejado para el mundo del cine.
El público meta de prácticamente todo lo que ha salido bajo la firma de Disney siempre han sido los niños, o al menos así nos lo hace pensar el marketing del que se hace uso para publicitar películas, cortos, series animadas y en general todos lo productos. A pesar de esto, la realidad es que los momentos bizarros, tétricos o simplemente extraños, han estado presentes a lo largo de toda la historia de la casa productora. Acompáñanos a recorrer ocho de este tipo de eventos que hasta la fecha, nos siguen volando la mente.
Con el objetivo de quitarle un molesto hipo a la pobre cría de elefante, Timothy encuentra un extraño líquido que según él, haría el trabajo. Para infortunio de Dumbo, lo que bebe con tanta enjundia, resulta ser una especie de licor alucinógeno que lo mete en un viaje bastante pesado al tierno protagonista de esta cinta clásica. Ver como se transforma todo el mundo de Dumbo es uno de los momentos más bizarros pero a la vez más memorables en toda la historia de Disney.
Las malas acciones normalmente tiene consecuencias. Esta fue la primicia sobre la que se construyó Pinocchio, clásico de 1940 que nos contaba una de las historias más obscuras que jamás hemos visto en Disney. Dentro de todos los momentos bizarros que contiene esta bella obra, se encuentra cuando el protagonista no hace caso a las advertencias y luego de consumir tabaco y alcohol, comienza a mutar de una manera bastante tétrica en un burro. Momento verdaderamente escalofriante.
Si de películas hechas por Disney extrañas hablamos, sin duda alguna el nombre de Alice in Wonderland salta a la mesa. Este loco viaje por una tierra llena de momentos por demás memorables, rápidamente se convirtió en uno de los clásicos más reconocidos de todos los tiempos. De entre todos los grandes momentos que componen a esta obra, se encuentra aquel en el que Alice se encuentra por primera vez con el carismático Gato de Cheshire. Ver cómo se va armando de la nada el rostro de este personaje, es por demás extraño; una verdadera locura.
Otra de las películas más bizarras, pero también más bellas jamás creadas por Disney es Fantasia. Este maravilloso experimento de animación y sonido cautiva absolutamente a todo el que lo ve. Cada una de las escenas que componen a esta película son verdaderamente memorables, sin embargo, hay una que nos marcó a muchos de nosotros por lo épica y tétrica que es. Noche en Bald Mountain es una autentica fiesta infernal en la que seres del inframundo salen de todas partes para enfrentar al aprendiz de mago. Justo cuando estamos muy cerca del climax de este increíble momento, aparece Chernabog, figura que representa al mismísimo demonio encarnado.
Al ser el primer largometraje animado de toda la historia, el legado dejado por Snow White and the Seven Dwarfs es completamente invaluable. Cada uno de los momentos que componen a esta cinta de los años treinta, se grabaron en la memoria de prácticamente todas las generaciones del Siglo XX. No todo en la cinta eran momentos llenos de dulzura con aves cantando, pues contaba con algunas partes bastante tétricas como por ejemplo, cuando la Reina Malvada se toma una poción para convertirse en una anciana que posteriormente le entrega la manzana envenenada a la protagonista. Una de las transformaciones más tenebrosas de este tipo de cine.
El tema de las alucinaciones y locos sueños, siempre ha sido una constante dentro de la películas de Disney. A pesar de toda la ternura bajo la que se desarrollan las obras protagonizadas por Winnie Pooh, la serie también ha tenido momentos que muchos de nosotros simplemente no esperábamos. Cuando el oso come miel decide tomar una siesta en Pooh’s Grand Adventure, varios pensamos que algo más contenía ese tarro, pues lo que reproduce su mente más bien parece un viaje en LSD. Ver a todos esos Efelantes y Wartas pintados de tantos colores y patrones, causó diversión y a la vez conflicto en mucho de nosotros.
Solo una colaboración entre el legendario Salvador Dalí y Disney podría tomar casi 60 años para ser completada. Contando también con el trabajo del compositor mexicano, Armando Domínguez, este cortometraje llamado Destino es un muy memorable paseo por el surrealismo que instituyó el artista español. A lo largo de sus seis minutos de duración, se nos cuenta la historia del amor que Chronos tiene por una mortal llamada Dahlia. Como seguramente te imaginarás en caso de que no hayas disfrutado de esta autentica obra de arte, el corto está lleno de momentos verdaderamente impresionantes que solo pudieron ser producto de Dalí y compañía.
Antes de que temas como el del nazismo se convirtieran en tabúes que actualmente se llegan a castigar con la cárcel, se dieron algunas críticas o sátiras muy interesantes en las que incluso participó Disney. Education for Death de 1943 (justo en medio de la Segunda Guerra Mundial) es un corto animado que nos cuenta la historia de Hans, un niño ario nacido en la Alemania Nazi que debe educarse en el régimen de Adolf Hitler. El contenido de este material es bastante extraño para lo que la casa de Mickey Mouse venía haciendo para esas fechas, pues es una especie de documental que intenta explica la forma en la que estas personas vivían. La calidad del mismo es muy buena, por lo que vale mucho la pena darle una oportunidad.