Los videojuegos son un arma de doble filo para las relaciones amorosas. Por un lado, pueden ser una fantástica actividad para fortalecer los lazos, y por el otro, existe la gran posibilidad de que dañen de manera importante las bases en las que se soporta todo. Hay títulos que por la gran cantidad de tiempo que te demandan, provocan que tu pareja se moleste y busque una mejor opción que un adicto al entretenimiento digital, mientras que otros, causaran celos auténticos… la inseguridad de algunas personas puede llegar a niveles insospechados.
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Las relaciones humanas son complejas, enredadas y muchas veces destructivas. Cuando uno se encuentra en la búsqueda de aquella persona especial, se deben superar varias etapas para conseguir lo que queremos. Uno de estos pasos es la famosa Friend Zone, punto en el que se nos trata como pareja sentimental, pero sin serlo de manera oficial. Por supuesto que algunos personajes de videojuegos, no se han salvado de esta calamidad.
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