Amado o criticado, Watch Dogs se convirtió en una de las cartas más fuertes y polémicas que Ubisoft lanzó el año pasado. Aunque mucho ya se ha dicho sobre el juego, a la compañía francesa le gustó el enorme recibimiento que su título tuvo. El pensar en una secuela para éste es inevitable, y en la desarrolladora lo saben. Por ello están consientes de que, si es que planean hacer una segunda parte, deberán de tomar más riesgos si es que quieren que ésta sea exitosa.
En una entrevista reciente realizada a Jonathan Morin, director creativo de Watch Dogs, el desarrollador comentó algunos puntos de vista que éste tiene tras la salida de su proyecto en mayo del año pasado. Aunque el título obtuvo buenas ventas y generó grandes ganancias, Morin está consciente de que el juego no fue perfecto en ningún sentido, y que varios de los elementos implementados no fueron del todo claros cuando la gente comenzó a interactuar con ellos.
Precisamente ese fue uno de los riesgos que existían con Watch Dogs al tratarse de una nueva IP, la cual no tenía ningún referente previo inmediato. No obstante y si llega a haber una secuela para el mismo, los riesgos deben ser aún mayores ya que cuentan con una entrega previa a la cual deben, en teoría, sobrepasar, en todos sus aspectos.
“Cuando comienzas un nuevo proyecto (y una nueva IP), es una hoja en blanco y todo lo que haces es lo que quieres hacer. […] Con una secuela, existe más presión para empujar a la marca, por lo que ahora deberemos de apelar a los fans de una nueva manera. Debes de acostumbrarte a tomar más riesgos” comentó Morin sobre el tema.
Sabemos que un nuevo Watch Dogs no se ha anunciado y que con esta entrevista la situación no cambia. Sin embargo, resulta interesante el saber que Ubisoft ya contempla la sola idea de hacerlo y que están dispuestos a arriesgarse de nueva cuenta para intentar sorprendernos.
Fuente: GamesTM
