Reseña: Borderlands 2

TRENDING

Todos tenemos diferentes razones por las que jugamos videojuegos. Algunos lo hacen para matar el tiempo, otros por diversión, algunos otros por que quieren ser profesionales, otros por que tienen que hacerlo por su trabajo. En fin, cada quien tiene sus razones. Personalmente, lo hago por que me gusta vivir experiencias diferentes, desconectarme de la realidad y visitar otros mundos en los que pueda ser un personaje diferente al que veo a diario en el espejo. Y hasta la fecha, en todos mis años de jugar videojuegos, ningún juego me ha acercado tanto a esta experiencia como Borderlands 2.

This ain’t no place for no hero

This ain’t no place for no better man

This ain’t no place for no hero

To call home

(Están escuchando Short Change Hero, de The Heavy)

Pandora es un mundo lleno de peligros y sin oportunidades. Con la fauna más feroz que se puedan imaginar y los ecosistemas más volátiles y letales que pudieran existir, pero que de igual manera posee paisajes hermosos y secretos tan valiosos que la ponen en riesgo de convertirse en una zona de guerra.

Cuenta la leyenda que existe una bóveda llena de tesoros y riquezas inimaginables, y quien la abra podrá tenerlo todo, además del poder de un arma que destruye todo lo que toca. Es ahí donde entran los Vault Hunters, personas cuyas habilidades les han permitido sobrevivir a los peligros de Pandora y cuya tarea es únicamente encontrar dichos tesoros, gracias a la ayuda de un “ángel guardián”. Así es como comienza tu aventura en Borderlands 2, en donde, a diferencia del primer título, alguien ya le puso precio a tu cabeza.

Los chicos en Gearbox Software han logrado algo que muchas compañías nunca han podido: crear una auténtica secuela. Si tuvieron posibilidad de jugar el primer título y ya probaron la segunda parte, sabrán que no me equivoco. Una historia más profunda, personajes mucho mejor elaborados, gráficas mejoradas, mucho más que explorar, más personalización, mejores vehículos, mejor cooperativo y mejores armas. Ok, no sólo mejores armas, sino miles de armas más (o quizá millones). De hecho, son tantas armas que será extraño tener la misma dos veces. Bueno, ¿quieren números? ¿Qué les parece tener 17 millones 750 mil armas? Nada mal, ¿no creen?

Éste es uno de los cuatro pilares principales del juego. Las armas. Es simplemente imposible quejarse de que no hay un arma que se acomode a tus necesidades. Si te gusta la tecnología, consigue un arma de Hyperion. Si eres más fan de la onda futurista, tienes Dahl. O si como a mí te gusta más lo clásico con tintes de steampunk, Jackobs es la elección.

Pero cada compañía tiene además sus propias cualidades. Las armas de Tediore son las más baratas y más corrientes, pero cuando te quedes sin balas en el cartucho puedes aventarlas como granada y reaparecerá en tus manos, claro, después de haber volado en pedazos a tus enemigos. Otro ejemplo son las armas de Vladof, quienes se especializan en velocidad de disparo. Ya sea que tengas una pistola de mano o un lanza cohetes, siempre verás salir los proyectiles como si fueran metralletas. Y podría seguir dando ejemplos y hablando de los tipos de armas o de lo cautivado que quedé con la variedad, pero perderían el sentido de asombro al ponerle las manos encima al juego.

El segundo pilar del juego es el botín. Todo el tiempo, en cualquier lugar, tienes que revisar cualquier baúl, cubeta, taza de baño, cajón o caja de cartón en búsqueda de tesoro. Éstos van desde dinero y balas hasta el precioso nuevo material llamado Eridium, una sustancia que podrás cambiar por mejoras en el mercado negro.

Si juegas tú solo, encontrarás una cantidad de recursos aceptable en tus viajes. Pero si te avientas a Pandora con tus cuates, la cantidad de botín se multiplicará, pero también los enemigos y sus ganas de verte muerto y vestirse con tu piel (o por lo menos así es como te amenazarán). Si tienes suerte, puedes encontrar baúles llenos de armas, escudos, modificaciones para tu personaje o para tus granadas y más cosas raras que, si no te sirven, siempre puedes vendérselas a tu médico de confianza, Zed, o a tu traficante de armas preferido, Marcus.

A lil’ bit of history

El tercer pilar en el que descansa suavemente Borderlands 2 es en su magnífica historia. Muchas veces he escuchado que simplemente existe como un pretexto para balacear todo lo que se mueva, conseguir dinero, comprar o encontrar más armas y repetir el proceso, ya sea sólo o acompañado. Para todos los que piensan eso, lamento decirles que no podrían estar más lejos de la verdad.

La historia ahora involucra muchos más personajes que la vez anterior. Uno de ellos, el antagonista, es Handsome Jack, líder de la corporación Hyperion y también el responsable de que la gente en Pandora viva en un estado permanente de miedo. También vemos otras caras nuevas como Tiny Tina, uno de los personajes más complejos, adorables y fascinantes que he visto en los más de 20 años de jugar videojuegos, o el gran Sir Hammerlock, un inglés con partes de robot que te ayudará en tu viaje.

Lo mejor de todo es que también vuelven los viejos conocidos pero ahora con roles completamente diferentes y con historias mucho más profundas que en el juego anterior, como Roland y Lilith, o el francotirador Mordecai. Todos ellos se unirán para contar una historia que en más de una ocasión me puso a sudar, me sacó carcajadas y hasta una que otra lágrima.

El cuarto y último pilar del juego es el fabuloso modo multijugador. No hay mejor manera de disfrutar Pandora que con tus amigos. Pocos juegos cuentan con una acción tan frenética pero al mismo tiempo tan organizada como Borderlands 2. Pero lo que me parece una idea excelente es poder cambiar ítems con tus compañeros de equipo. Si encuentras un arma muy extraña, pero no es lo que estás buscando, puedes cambiarla con alguien que tenga lo que quieres. Asimismo puedes ayudar a alguien en una misión que no pueda pasar o viceversa o nada más ir a explorar los escenarios.

Y si no tienes amigos que tengan tus mismos gustos en juegos, siempre está la opción de jugar en línea con completos desconocidos en la campaña de alguno de ellos o incluso en la tuya.

Estos cuatro son los puntos más importantes de Borderlands 2, pero curiosamente quizá significan apenas un 50% de todo lo que tiene que ofrecer. Todavía quedan muchas sorpresas en este pequeño disco.

Posiblemente muchos no lo sepan, pero Borderlands 2 es un título que combina a la perfección el RPG con los shooters en primera persona. Pero en serio, lo hacen de una manera impecable. Como si combinaras unos tacos al pastor con unos ricos hot cakes de feria y te supieran a gloria (no intenten esto en casa, pero si lo hacen, díganme qué tal sabe).

En el primer juego podías escoger a Roland, a Brick, a Lilith y a Mordecai, cada uno con sus propias habilidades. En esta ocasión vuelven los diferentes tipos de clases, pero los personajes son mucho más elaborados. Podrás comenzar tu camino con Axton y sus torretas portátiles, o con Maya y su telekinesia, Salvador y su habilidad de tener un arma en cada mano, sin importar su tamaño, o con mi preferido, Zero, un guerrero que puede crear un holograma de si mismo al hacerse invisible y sorprender a sus enemigos por cualquier ángulo.

Cada uno de ellos tiene un árbol de habilidades que podrás ir mejorando conforme subas de nivel, tal como en el primer juego, pero ahora nos presentan además un nuevo rank llamado Badass Rank.

Don’t be afraid of being badass

Aquí ganaras puntos por ser un chingón, así de simple. Hay diferentes retos que podrás ir completando uno a uno a cambio de Badass Tokens, mismos que te servirán para mejorar tus habilidades generales, como salud, velocidad de disparos, regeneración de escudo, etcétera. Esto es una gran adición que enganchará a más de uno. Además de que hay retos sumamente divertidos y muy satisfactorios de lograr.

Los gráficos y la música son otra de las combinaciones que encuentran la perfecta armonía con toda la sangre y balas regadas en los escenarios. Algo que amé en el primero es la manera en la que aumenta el ritmo de la música al encontrarte en una situación de vida o muerte. Aquí vuelve, pero con mucha más intensidad y sentimiento que encajan a la perfección con el caos virtual que corre por tu cuenta.

Los paisajes con maravillosos. Sin duda Randy Pitchford sabe cómo sacar suspiros de la gente. Puedes pasar de un terreno desolado a un campo de batalla en medio de la nieve en un abrir y cerrar de ojos.

La cantidad de monstruos que quieren comerte o simplemente machacar tus huesos subió exponencialmente, y podrás ver desde arañitas que seguramente quieren que seas el padre de sus crías, hasta monstruos del tamaño de un estadio de futbol. Además de todo, nos introducen a los robots, que también hay de mil variedades diferentes.

Gearbox llegó a un punto que muchos van a envidiar por muchos años. Logró lo que Francis Ford Coppola hizo con El Padrino 2, o lo que Christopher Nolan consiguió con The Dark Knight o George Lucas con El Imperio Contraataca. Hicieron una segunda parte que supera por mucho a la primera, pero se mantiene muy fiel a sus raíces, es mucho más grande, tiene la misma esencia pero con un humor mejorado, y de igual manera vas a terminar amando.

Si eres fan de los FPS y RPG, si te gusta la variedad, los mundos abiertos, las gráficas estilizadas, la buena música, el buen humor ácido, los juegos en los que puedes clavarte por días enteros, los retos, jugar con tus amigos, robarles el botín, las buenas historias, los personajes entrañables y lo más importante, disparar armas de todos tipos, olores, colores y sabores, Borderlands 2 no puede faltar en tu librería. Si no te gusta nada de esto, de todos modos los invito a que le den una oportunidad. Y si de plano odias lo enlistado arriba, sigue con la rutina cotidiana.

9.5