Hasta la hora del Pikachu amarillo, ¿cuántas veces habré mirado al poderoso Charizard de fuego? ¿Qué lo hacía atractivo? ¿Era porque aparecía en la portada del juego? ¿Por qué al escogerlo sabíamos que tomaríamos el camino difícil? Pero, ¿qué es lo que, para quienes jugamos las primeras versiones de Pokémon, diferenciaba a Charizard de Blastoise y Venusaur, más allá del evidente tipo fuego? Preguntando aquí y allá, una de las respuestas más comunes fue “es un dragón” y los dragones, para quienes crecimos con la moda dinosauril de los 90's, eran sinónimo de genialidad.
LEER +Una de las razones –siempre lo digo– por las que más me fascinan los videojuegos es su capacidad para encender la imaginación. Esto no es una característica exclusiva, pero este medio lo logra de una manera bastante particular. Se nos puede presentar, por ejemplo, un problema abstracto, geométrico, o matemático en forma de puzzle, o una prueba a los reflejos y de trayectorias con un shooter; pero también nos pueden poner dentro de una aventura cuyas proporciones dependerán no de la capacidad de nuestros dedos, o de un motor gráfico para mostrar texturas y efectos de luz: una travesía que dependerá de la imaginación.
LEER +A finales del mes de agosto del año pasado, tuvimos una charla en el after de Atomix Live 151 sobre realidad virtual y tuve la oportunidad de hablarles de uno de mis libros favoritos: Ready Player One, de Ernest Cline. Cada día vemos más noticias respecto a los desarrollos de tecnologías de realidad virtual por parte de varias empresas, y hoy con el anuncio de la compra de la empresa Oculus VR por parte de Facebook podemos darnos cuenta de que ese futuro, de un mundo virtual, está ya muy cerca.
LEER +Algo que me sucede es que para relajarme y terminar el día, no puedo dejar de jugar algo antes del momento en que cierro los ojos para dormir; ya sea en una portátil, o en la consola casera, mi última acción del día casi siempre tiene que ser jugar algo para eliminar cualquier tensión y estrés.
LEER +No eras tú aquél boxeador de cabello verde de 1984. No… era muy alto para ser tú; esperabas el momento. Tu momento. Sí, esperaste un poco. Tenías que entrenar, lo entiendo. ¿Recuerdas cuando conociste, por azar, a Doc? El buen Jerome Louis ha perdido condición, ya no es la estrella del boxeo que fue en la época dorada de los pesos pesados y come más barras de chocolate que cualquiera. Pero le has aprendido bien, sí. Él te enseñó tu clásico “Star Punch”, no se te olvide. "Dancing like a fly, bite like a mosquito!", ¿cómo olvidar esa frase? Y cuando en la pelea por el título te dijo que te unieras al divertido club de Nintendo. ¡En qué momento te lo dijo!
LEER +Tuve la fortuna de vivir en Corea del Sur por un tiempo. Durante ese periodo, viví experiencias que cambiaron mi vida y pude presenciar de primera mano muchas manifestaciones de la cultura asiática oriental. Obviamente, una de las facetas en las que más puse atención fue la relacionada a los videojuegos. Ya en otras ocasiones he tenido la oportunidad de hablar acerca de la cultura gamer en Corea, pero esta vez, me gustaría abordar el tema que más bien es global, ¿cómo le enseñamos videojuegos a nuestros hijos?
LEER +“El GTS está lleno de subnormales”, responde mi amigo. Yo asiento, estoy de acuerdo. Antes le comento, casi como reclamo, que buscaba en la Global Trade Station (GTS) un Natu con Magic Bounce. No pido demasiado, pienso; es sólo un avecilla psíquica que tengo la no-fortuna de no-tener en mis Friend Safari. “Sí hay Natus, pero piden Lugias y otros legendarios. ¿Por qué piden cosas que no?”, le digo.
LEER +Históricamente, cuando llegamos al momento en que cada humano tiene en sus manos una cámara que llevan a todas partes –incluso a la hora de dormir–, se comenzó a dar una transformación en nuestra búsqueda del recuerdo. Es una lástima que hoy la internet esté llena de fotos de comida irrelevante, o de autorretratos de gente que se acaba de levantar: “Miren, mi cabello despeinado, ¿verdad que es kawai?”
LEER +Estamos iniciando febrero, mes que muchos llaman “del amor y la amistad” por la fecha en que recordamos a los amigos y las personas a quienes amamos. Los videojuegos son una experiencia que en ocasiones se disfruta mucho más en compañía, no importa si los que tienes a un lado son espectadores o participantes en la partida. En este sentido, la amistad es un valor muy importante que nos ayuda a disfrutar mucho más de los juegos que tanto nos apasionan.
LEER +Spielberg, ya sin querer saber nada de juegos, negaba una segunda oportunidad a The Walking Dead, Journey y The Last of Us, títulos que, según los presentes allá reunidos, formaban parte de las grandes experiencias que han tenido. El cineasta venerado, el rompe récords hollywoodense, concluyó diciendo que “si se necesita un control, no podrían ser tan artísticos y queridos como Indiana Jones IV”. Con que, vamos, más fecundo en ardides que el propio Odiseo, ciñó y batió la tierra y a la audiencia cual Poseidón con su poco amable comentario.
LEER +Durante las décadas de los ochenta y noventa, el juguete dentro de la caja de cereal era uno de los mayores atractivos para los niños: ¿un carrito? ¿un títere para los dedos? ¿una figura coleccionable? ¿un silbato? ¿tarjetas? Hasta lo que menos nos imaginábamos adornaba la caja de cereal, que no nos atraía simplemente por el sabor del alimento, sino que la ilusión siempre estaba en encontrar una sorpresa dentro de la caja de cereal; un regalo sorpresa que buscábamos con desesperación al llegar a la casa después de pasar a surtirnos en las tiendas.
LEER +Logros, trofeos, contenidos descargables, extras desbloqueables, objetos escondidos... ¡Auxilio! ¿Cuándo dejamos de jugar por el simple hecho de divertirnos? Conforme avanza la tecnología y evoluciona la industria de los videojuegos, nos vemos invadidos por distintos fenómenos relacionados con los nuevos medios digitales, los cuales nos empujan hacia conceptos como la instantaneidad, la inmediatez y lo efímero.
LEER +Nidhogg es todas las escenas de acción, “Esto es Nidhogg”. ¿Pero cómo puede ser posible tal afirmación? Creo que algo de su magia sucede en sus personajes sin atributos: un hombre pixel (¿Sr. Pixel?), un contenedor vacío que puede recibir la personalidad y las características que cada jugador le ponga cuando juegue. Y en un juego con un balance tan claro (sin power-ups, sin tiers) sólo resta ver quién es mejor y quién saca la mayor sorpresa.
LEER +Cuando éramos muy pequeños, llenamos ese “algo” con mascotas virtuales o simulaciones de ellas. Tuvimos Furby, Meow-chi, Tamagochi, Pikachu y hasta un Digimon de bolsillo. Seguíamos las reglas básicas: dar de comer, jugar, caminar, pasear y hasta cambiar baterías. Aunque apreciábamos estas posesiones, estaba claro que mi Furby no me quería como yo a él, o que darle las buenas noches a mi gatito robot no lo llenaba emocionalmente.
LEER +Yo crecí leyendo revistas de videojuegos. Es entre una ironía de la vida y destino sincero que trabaje en esto, en la producción del tipo de contenido que de pequeño se llevaba mis fuerzas. De hecho, prácticamente aprendí a leer con revistas de videojuegos, y recuerdo que para mí el más grande regalo era cuando mi papá me traía una revista, sobre todo cuando llegaba de algún viaje.
LEER +Quizá muchos de ustedes se pregunten por qué Katya Ocampo sube noticias de donaciones a alguna fundación. Creo en que las personas podemos mejorar el lugar en el que vivimos con pequeñas acciones que sumadas superan enormes desafíos. Hace algunos meses me encontré con un artículo llamado “Cómo los videojuegos ayudan a los soldados a lidiar con los horrores de la guerra”. En un principio imaginé que al ser los videojuegos un medio para la recreación y esparcimiento tenía todo el sentido del mundo.
LEER +Es una lástima que los miembros del staff no podamos participar en la dinámica de anécdotas navideñas, porque de ser así me estaría hinchando de premios. Es impresionante la cantidad de recuerdos relacionados con los videojuegos que nos dejan las celebraciones decembrinas. ¿Quién no recuerda jugar con los primos, o acudir a la casa de algún vecino que estrenaba consola?
LEER +Años después, el propio Paul acompañado de Ringo anunció The Beatles Rock Band: llegaría un 09/09/09 junto con las remasterizaciones de la discografía. Mi pregunta era: ¿tendría The Beatles Rock Band aquella canción “Hey Bulldog”? Cuando me enteré de que sí estaría, la adquisición pasó de ser must-buy a must-buy-alpha-plus. Ya no era opción. Era necesario.
LEER +Hace algunos meses, tuve la oportunidad de leer un libro que me dejó pensando varias cosas. Muchas lecciones interesantes pueden venir en formato de libro para niños. Fue así como me encontré leyendo cierta novela de Christine Nöstlinger. Un libro que critica a quienes buscan que los demás cumplan con los arquetipos –en lo personal y en lo familiar– para encajar en una sociedad en la que los moldes ya están hechos.
LEER +Una de las tradiciones más bonitas en México es el Día de Reyes que pudimos celebrar el día de ayer, una fecha llena de magia para muchos niños que es incluso más importante que la navidad por el hecho de recibir regalos. Uno de los aspectos que considero más sobresalientes de esta celebración es la ilusión que tienen los niños que, en su inocencia, creen en que hay algo sobrenatural que materializa sus regalos en la madrugada del 5 de enero de cada año.
LEER +Aunque nadie puede afirmar que la imaginación es una facultad exclusiva del hombre, la consideramos como uno de los elementos que mejor definen la condición humana. A ésta le atribuimos toda clase de fenómenos, sobre todo de conducta, tanto negativos como positivos.
LEER +Si logramos acreditar que el talento mexicano existe, el capital de producción vendrá al país para desarrollar la industria mexicana de videojuegos.
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