Review – Uncharted: The Lost Legacy

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Naughty Dog nunca falla

Hacerse de un nombre dentro de uno de los medios más competidos dentro de la industria del entretenimiento, es algo verdaderamente complicado que muy pocos consiguen. La historia de Naughty Dog como parte de los estudios first party de Sony Interactive Entertainment es verdaderamente extensa, remontándose hasta tiempos del PlayStation con la creación de Crash Bandicoot; sin embargo, esta compañía pasó a tener un status entre los grandes cuando vimos sus capacidades en todos los ámbitos con la trilogía de Uncharted en el PS3, misma que se vio coronada con Uncharted 4: A Thief’s End recientemente en el PS4. A pesar de haber anunciado que su trabajo con Nathan Drake y compañía había concluido, los también padres de The Last of Us nos dan la oportunidad de disfrutar una nueva aventura con Uncharted: The Lost Legacy, juego que definitivamente ha sido de lo mejor que he consumido en este fantástico 2017.

Vale la pena mencionar que además de tener objetivos comerciales y artísticos muy claros como por ejemplo, sacar más jugo del impresionante motor gráfico propio de Naughty Dog que tanto nos asombró en Uncharted 4, The Lost Legacy busca que el nuevo equipo interno del estudio adquiera experiencia para posteriormente trabajar en otros juegos. Vale la pena mencionar que Niel Druckmann no aparece en los créditos de este título de ninguna manera, asunto que nos hace pensar que su participación en el proyecto sí fue por demás efímera, dejando que el talento joven se hiciera cargo por completo. A pesar de que lo anterior nos podría hacer pensar que tendríamos un Uncharted a medias o sin el cuidado de pasadas entregas, me alegra decirte que no es así, pues estamos ante una obra que carga con muchísima dignidad su pesado nombre y que en ningún momento deja ver defectos marcados.

Un Uncharted en toda la extensión de la palabra

Lo primero que todos nosotros pensamos cuando Uncharted: The Lost Legacy fue revelado en PlayStation Experience de 2016, fue que se trataba una expansión mayor de Uncharted 4, la cual, necesitaría de este juego para poder funcionar. Inclusive gente de Naughty Dog ha declarado que la idea original era hacer algo parecido a lo que fue Left Behind de The Last of Us, no obstante, conforme el proyecto iba tomando forma, se decidió que tendría las piernas suficientes como para ser un título standalone que se pudiera vender por separado, esto para más bien convertirse en una especie de spin-off o historia alterna de la famosa saga.

Uncharted: The Lost Legacy es un juego completo de la franquicia. Esto es algo muy importante que vale la pena resaltar, pues a pesar de toda la información que se nos ha dado previa a su lanzamiento, hay muchos quienes piensan que tan sólo se trata de un DLC. Este título cuenta con su propia campaña que dura alrededor de 10 horas, además de que incluye absolutamente todo el multiplayer que vimos en Uncharted 4 que bastantes personas siguen disfrutando (incluido el modo survival). Lo mejor de todo este asunto es que estamos hablando de un paquete que se venderá a un precio un 30 por ciento menor a lo que cuesta actualmente cualquier estreno. Te repito, no necesitas tener A Thief’s End para que el juego corra.

Por supuesto que habrá quien justamente no lo baje de ser una mera expansión de Uncharted 4, pues se basa por completo en su motor gráfico, así como en sus mecánicas de juego y estructura general. Una vez más tenemos a un shooter en tercera persona muy bien logrado que toma elementos de platforming y puzzle, combinándolos de distintas maneras para darle el sabor tan característico que la franquicia siempre ha tenido. Sí, desde que uno comienza a jugar The Lost Legacy, el ADN de Naughty Dog se siente muy presente en todos los apartados del juego, luciendo un nivel de detalle verdaderamente impresionante.

Las escenas de acción y disparos en The Lost Legacy son emocionantes y bastante retadoras en los niveles de dificultad elevados, esto claro, sin hacer grandes contribuciones a lo que ya habíamos visto de la saga. Los momentos de adrenalina en los que está pasando algo verdaderamente increíble muy apegado al aspecto cinemático pero que en todo momento tenemos control de nuestro personaje, están de regreso para dejarte con la boca abierta. Me parece que a pesar de que este nuevo equipo de Naughty Dog siguió al pie de la letra la plantilla que les dejaron de Uncharted 4, sí lograron hacer que estas partes en las que todo se está destruyendo a nuestro alrededor, tuvieran personalidad propia y que incluso, se volvieran memorables entre todo el amplio lore de Uncharted. Me encantaría describirte un par de ellas pero te estaría arruinando grandes sorpresas. Sólo te diré que te encantarán y que hay un tributo a Uncharted 2: Among Thieves que seguro te sacará una enorme sonrisa.

Algo en lo que creo, The Lost Legacy sí aportó bastante a lo que es esta franquicia, es en el diseño de puzzles. Los Uncharted siempre han sido juegos que a pesar de contar con una fuerte carga de acción con extensas escenas en las que tenemos que matar a cientos de enemigos, también ha sabido cuándo detenerse para hacernos sentir como Indiana Jones en busca de un tesoro o ciudad perdida. En mi caso, estos cuartos en los que tenemos que resolver algún problema es de lo que más disfruto de esta franquicia, pues su sensacional diseño se convierte en otro fuerte argumento para contrarrestar por completo a quienes dicen que estas aventuras son meras películas interactivas en las que poco se nos involucra como usuarios.

La creatividad en el diseño de algunos de los puzzles de The Lost Legacy me dejó verdaderamente impresionado. Muchos de ellos utilizan la composición básica de estos rompecabezas circulares que tienen varias secciones que se deben de girar para formar una imagen, por ejemplo. Lo interesante es que cada parte afecta de manera directa a la adyacente y a pesar de que al menos dentro de este juego no son tan complicados, la belleza de su estructura los hicieron increíblemente disfrutables. También tenemos un par en el que debemos de saltar entre plataformas para mover unas estatuas en el orden correcto y claro, las sombras hacen su regreso triunfal en un puzzle muy bello. En este aspecto, el juego cumple con creces lo que estábamos esperando de él. Me encantaría que si la serie tiene futuro, se recargara mucho más de este tipo de gameplay y no tanto en las balaceras.

Cosas como el gancho y cuerda que vimos introducido en Uncharted 4 también aparecen en The Lost Legacy, así como esta divertida mecánica de resbalar en algunas superficies especiales. Esta nueva entrega de la serie está completamente apegada a lo que su antecesor dejó, pero sigo creyendo que decirle “DLC” es bastante injusto por todo el trabajo que se le metió y por supuesto, contenido de altísima calidad que tiene para ofrecernos. Si estabas dudando de las bases y fundamentos de este título, te puedo decir que es sumamente sólido en todos sus apartados y, que si eres fan de la serie, te dejará más que contento con todo lo que hace, siendo un Uncharted en toda la extensión de la palabra. ¿Más de lo mismo? Sí, pero ¿quién no querría más de esta saga?

Con toques de exploración

Los juegos de mundo abierto en los que supuestamente se permite que el jugador tome el control de su propio destino son una tendencia que según parece, se mantendrá vigente por muchos años más. Dicho asunto ha impactado hasta a los estudios más grandes del medio que no se dedican a hacer este tipo de experiencias. Como serie, Uncharted siempre había logrado hacernos sentir como exploradores sin que la exploración libre como tal fuera parte de su estructura, esto gracias a pasillos absurdamente detallados que por momentos, te permitían hasta oler la humedad de una cueva o el polvo que por siglos se había acumulado en una tumba antigua. A pesar de lo anterior, en A Thief’s End vimos un coqueteo muy marcado con un escenario abierto, asunto que fue llevado un poco más allá en The Lost Legacy, pero sin perder de vista la esencia de la franquicia.

Al igual que en el capítulo de Uncharted 4 en el que estamos con Sully en la sabana de Madagascar montados en un Jeep, llega un punto en The Lost Legacy en el que se nos pone en un mini mundo abierto que podemos explorar con cierta libertad. El tema es que ahora, sí se le agregaron distintos objetivos a completar, incluso un par de actividades secundarias que te puedes saltar, justo como pasa en títulos del subgénero. Aquí se nos da un 4X4 como vehículo para recorrer la zona, además de un mapa que nos indica más o menos en dónde hay puntos de interés y cuáles son nuestros objetivos principales, los cuales se pueden cumplir en el orden que queramos. Sorpresivamente, la narrativa dentro de esta sección no pierde la línea ni se ve diluida, pues a pesar de que estamos un poco más en control de cómo es que fluye la situación, el diálogo de los personajes mantiene su complejidad y nunca deja de hacer sentido.

Continuando con el tema del mini mundo abierto de The Lost Legacy, es importante resaltar que el quest secundario que presenta, es muy divertido de completar. En él, tienes que encontrar una serie de medallones que están esparcidos por todo el mapa. Para obtener cada uno de ellos, debes de completar algún reto o puzzle. Cada una de estas actividades es distinta, haciendo que juntar estos objetos, sea algo sumamente interesante y entretenido. Si terminas dicha actividad, se te recompensa con un ítem especial que te servirá en el resto de tu aventura.

Esta parte que te describo aparece en las primeras horas de The Lost Legacy, por lo que me hizo pensar que más adelante, me toparía con otra del estilo, no obstante, Naughty Dog decidió que con eso era suficiente y luego de completar la sección de “exploración de un mini mundo abierto” era tiempo de regresar a la estructura clásica de la saga. Sí, además del espectacular intro, este nuevo Uncharted funciona como siempre ha funcionado la franquicia, es decir, atraviesas un túnel muy bien disfrazado en el que vamos haciendo distintas actividades que se ven acompañadas por elaboradas cinemáticas que la dan sabor a la parte narrativa, esto hasta que los créditos empiezan a rodar frente a nuestros ojos, asunto que en mi opinión, es totalmente acertado, pues a pesar de que esta sección de supuesta libertad es buena, creo que las nuevas propuestas de la serie no se deben olvidar de qué es lo que las hizo tan grandes e importantes.

El acercamiento de Naughty Dog hacía este tipo de juegos tipo sandbox cada vez es más intensa, pero me cuesta trabajo pensar en que The Last of Us Part II, vaya a ser una experiencia completamente volcada a este diseño, con todo y la presión que existe por parte de otros estudios first party de Sony como Guerrilla Games y el éxito que tuvo con Horizon Zero Dawn, o con lo que vaya a ser Days Gone de Bend Studio en un futuro. La industria sigue necesitando de juegos lineales que sean teatros completamente controlados por el autor. Ya basta de siempre darle contexto negativo al término “lineal”.

Las relaciones humanas como base narrativa

La historia y en general narrativa, siempre ha sido parte fundamental de cada título de Uncharted. Los relatos que se nos han contado en esta franquicia son entrañables y se han guardado en nuestra memoria para siempre. Dado lo anterior, lo que pudiera hacer The Lost Legacy en este apartado, seguro sería tema de conversación, sobre todo si tomamos en cuenta que por primera vez, el carismático Nathan Drake no es el protagonista. Chloe Frazer, también cazadora de tesoros que vimos debutar en Among Thieves, es a quien controlamos en esta nueva aventura, dejándonos saber mucho más de este personaje bastante misterioso y hasta exótico por momentos.

Los eventos de The Lost Legacy se ubican unos meses después de Uncharted 4 y a pesar de que se consideró la idea de ver a Nate de regreso, Naughty Dog decidió que no tendría tanto sentido por cómo fue que acabó el título antes mencionado, por lo que Chloe recibió la oportunidad de cautivarnos en una expedición a la India en busca de un tesoro mítico conocido como el Cuerno de Ganesh. La realidad es que el relato de este nuevo Uncharted se mantiene por una línea sumamente conocida, en el que nuestro personaje, sin mayores recursos, está en una especie de carrera contra un villano armado hasta los dientes, por encontrar esa ciudad u objeto perdido en el tiempo. A pesar de lo anterior, nunca me topé con una historia que se sintiera cansada o repetitiva, pues una vez más, el equipo desarrollador deja claro el profundo estudio que hubo acerca de la cultura que se ilustra dentro del juego.

Una de las razones por las que muchos de nosotros adoramos a Uncharted como serie, tiene que ver principalmente con lo increíbles que son sus personajes y el desarrollo que éstos tienen a lo largo de su viaje, así como las relaciones que viven entre ellos. A Thief’s End fue una historia en la que la interacción de Nathan con su hermano Sam fue fundamental, y ahora con The Lost Legacy, se hace algo parecido con Chloe y Nadine Ross, está última siendo parte de los antagonistas de Uncharted 4. La forma en la que se hablan estas dos exploradoras y cómo es que su relación va teniendo distintos matices, es verdaderamente sensacional, haciendo que ambas se conviertan ahora en rostros muy reconocidos de la serie que la verdad, me gustaría tener de regreso en un futuro.

Resulta inevitable no comparar a Chloe con Nathan, pues al igual que el icónico protagonista de Uncharted, esta cazadora de tesoros cuenta con una personalidad bastante extrovertida que no tiene miedo de en todo momento decir lo que piensa, así como de contar con un sentido del humor bastante marcado hasta en momentos de peligro extremo. El tipo de guión de The Lost Legacy es muy similar a todo lo que habíamos visto dentro de la serie anteriormente. Por más bien que me cae esta nueva estrella, creo que se pudo haber hecho un mejor trabajo para separarla más de cómo es que se comporta Nate. Como sea, lo anterior contrasta de muy buena forma con la personalidad mucha más dura y seca de Nadine, en quien se ve una mutación bastante más perceptible de cómo es que inicia la historia, hasta cómo cierra en ella.

Sí, la historia de The Lost Legacy es predecible sobre todo para los que llevamos desde un inicio disfrutando de Uncharted, sin embargo, los eventos que se dan en ella a lo largo de la aventura, son emocionantes e incluso con algunos giros inesperados, esto sin mencionar que igualmente funciona sobre dos líneas. La primera es la de los protagonistas y cómo es que lidian con las situaciones que se les presentan y la segunda, es el relato de qué fue lo que pasó con la cultura hindú que visitamos en este título, de la cual y como te comentaba, hubo un profundo estudio sobre su mitología y forma de vida. Es sensacional cómo es que los juegos de esta serie combinan a la perfección su propia ficción con hechos históricos que marcaron al mundo.

Majestuosa dirección artística

Justo como te acabo de platicar, cada Uncharted tiene un sabor sumamente especial por lo atmosféricas que llegan a ser sus experiencias gracias a las representaciones fuertemente detalladas de un lugar que nadie había visitado en muchos años. Tate Mosesian recibió la oportunidad de estar detrás de la dirección artística de The Lost Legacy, tarea nada sencilla si uno toma en cuenta lo que se consiguió recientemente con Uncharted 4 en este apartado. Afortunadamente, podemos decir que este nuevo talento fue muy bien encaminado, pues estamos frente a un videojuego majestuoso que en cada uno de sus rincones presenta algo que vale la pena observar.

Algo verdaderamente impresionante de Uncharted: The Lost Legacy más allá del cuidado en cada uno de los elementos que componen a su preciosos escenarios, es el sentimiento de tamaño que busca transmitir. Constantemente me veía con la boca abierta contemplando una colosal estructura a lo lejos que unos minutos más tarde, me encontraba escalando o ya dentro de ella. El sentir que estas viviendo el minuto a minuto con los personajes de la historia, es crucial para que una experiencia como ésta sea funcional en todo sentido, asunto muy complicado de lograr pues se debe de tener coherencia y constancia en cómo es que van presentando cada una de las locaciones del juego. No entiendo bien cómo lo logró Naughty Dog, pero cada cuarto, zona, valle, tumba o lugar en general de su nuevo título, tiene algo especial y diferente. El modo fotografía de Uncharted 4 también está presente.

Gráficamente sobra decir que también estamos frente a un juego impresionante con una gran trabajo en cosas como la iluminación, físicas, calidad de texturas y por supuesto, animaciones de todo lo que se mueve en pantalla. Sigo considerando que si Naughty Dog puede sacar jugo de tal forma de una máquina como el PlayStation 4, entonces quejas de otros desarrolladores sobre las capacidades de la consola, están totalmente injustificadas. Vale la pena mencionar que jugué The Lost Legacy en un PS4 estándar a 1080p y a 60 cuadros por segundo sin ninguna caída de framerate notable. El título se puede poner con HDR si tu televisión tiene esta característica.

Además de todo lo anterior, tenemos una mezcla y edición de sonido sobresaliente que convierten a Uncharted: The Lost Legacy en una experiencia audiovisual que vale completamente la pena seas o no fan de la franquicia y que en más de una ocasión, hace que tu equipo de entretenimiento brille intensamente para recordarte por qué es que invertiste tanto dinero y esfuerzo en él.

¿El final de la leyenda?

Uncharted como franquicia, es producto de esta sensacional etapa durante la generación pasada de consolas en la que varias nuevas IP nacieron para convertirse casi de manera instantánea en todos unos clásicos del medio. El trabajo de Naughty Dog rápidamente pasó de ser considerado bueno, a algo que muy pocos pueden emular actualmente, por lo que con todo y que The Lost Legacy fue encargado a un equipo interno sin tanta experiencia, sabíamos que el resultado final difícilmente sería una decepción. Creo que con este título, queda claro que el éxito del estudio no es producto del talento de dos o tres personas solamente, más bien estamos hablando de un sistema perfectamente estructurado y alineado para que cada producto que salga de su oficina, sea sobresaliente y muy por encima de la media a la que la industria nos tiene acostumbrados.

Es verdaderamente doloroso que al menos ahora, sepamos que Uncharted: The Lost Legacy es la última vez que Naughty Dog trabaja con la franquicia, pues además de que actualmente sus esfuerzos están totalmente enfocados en lo que será la secuela de The Last of Us, seguramente en el futuro tienen planeado hacer algo totalmente nuevo. Apostaría a que si eres fan de Nathan Drake y compañía, este juego es un alta prioridad para ti. Si de lo contrario, nunca le has dado una oportunidad a la serie, puede que ésta sea una buena opción para iniciar, pues a pesar de ser el capítulo más adelantado en la línea del tiempo del canon, nunca se olvida que para muchos será su primer aventura en este fantástico universo. Claro que un poco más de riesgo y algo no tan calculado nos hubiera encantado, pero hay que entender que estamos frente a un proyecto de menores dimensiones y sin grandes ambiciones. Como sea, esta es una maravillosa despedida (esperemos que temporal) de una de las grandes propiedades intelectuales del medio que robustecen aún más el catálogo de exclusivas del PlayStation 4.

Alberto Desfassiaux
Editor en Jefe de Atomix. No me gustan los videojuegos... ¡adoro los videojuegos!