Fórmula perfeccionada con brillantes adiciones

Uno de los fenómenos que cada vez se hace más común en la industria, tiene que ver con estudios encasillados dentro de una fórmula luego de haber tenido uno o dos grandes éxitos. Rocksteady apareció casi de la nada para revolucionar por completo el género de súper héroes, asunto que se terminó expandiendo hacia otros géneros, sobre todo al de los mundos abiertos no tan masivos pero muy bien controlados. Por supuesto que dicho caso perfilaba al extremadamente talentoso estudio inglés a caer en lo que ha llevado a muchos otros a la perdición. El hecho de haberme dado cuenta de que Batman Arkham Knight no es prueba de esto, sino de todo lo contrario, no podría alegrarme más. La nueva aventura del caballero de la noche nos demuestra que el dicho “si no está roto, no lo arregles” simplemente no aplica cuando las buenas ideas son legitimas.

Por supuesto que Arkham Knight sigue una fórmula perfectamente establecida y dominada por sus creadores, sin embargo, estos tomaron pequeños, pero muy audaces riesgos en materia de gameplay para hacer de este juego uno de los más brillantes del año. No, el título no es cien por ciento perfecto, pero cumple de manera magistral cada uno de sus objetivos, asunto que es por demás loable y que nos deja claro que los retrasos que sufrió fueron para bien. La espera ha valido por completo la pena.

Juego de verdadera siguiente generación

Lo primero que salta a la vista cuando el nuevo Batman comienza a correr es su apartado gráfico. En esta ocasión, Rocksteady decidió que una Gotham City devastada en medio del aguacero nocturno de Halloween sería el mejor escenario para cerrar con esta épica saga de videojuegos.

Cuando me enteré que a lo largo de todo el juego, una tormenta no dejaría de azotar a la icónica ciudad, me preocupé un poco. Hacer lluvia es uno de los puntos más complicados de lograr con éxito. Hemos sido testigos constantemente de que ni siquiera juegos maravillosos de presupuestos gigantescos consiguen hacer que el clima luzca bien. A la mente se me vienen cosas como el fantástico Dragon Age Inquisition o el aclamado Middle-Earth Shadow of Mordor, los cuales, se venían ligeramente abajo cuando el agua comenzaba a caer del cielo.

En cuanto emprendí el primer vuelo con Bruce Wayne, me di cuenta de que mis preocupaciones por lo anterior estaban completamente injustificadas. Escuchar el sonido de cada gota de agua golpeando contra el techo del edificio, tan solo se vio superado al ver cómo cada una de ellas escurría por el traje de nuestro protagonista. Los cambios de la luz de la luna y letreros neón en las partículas que caen del cielo, harán que hasta el más quisquilloso se sorprenda.

El mapa de Arkham Knight, mismo que tocaremos a detalle un poco más adelante, luce como sacado de una de las cintas de Christopher Nolan, sobre todo de la primera. Cada uno de los logotipos de marcas, cruces de calles y alcantarillas que despiden vapor, te harán sentir que de verdad estás en una ciudad amenazada por un súper villano. Por supuesto que lo anterior se ve perfectamente endulzado por un soundtrack adecuado que suena cuando debe, y se calla cuando así se requiere.

La atmósfera de Arkham Knight es verdaderamente profunda, muy probablemente de las que más he sentido en esta generación de consolas. Por supuesto que los interiores de algunos de los lugares no quedan para nada a deber. Cada cuadro y cada gotera están colocados en el lugar adecuado para que este maravilloso teatro se mantenga intacto. Dense una buena vuelta por el departamento de policía y seguro te llevarás una enorme sorpresa. Las referencias e easter eggs a las entregas pasadas de la serie, así como a cómics y películas, están por doquier.

Las animaciones y texturas fueron trabajadas de gran forma, haciendo sentir que todo es real y tangible, al igual que las interfaces para mejorar habilidad y equipo; cada logo de estos iconos luce más que genial.

Otro punto que me preocupaba cuando el juego fue revelado, tenía que ver con su dirección de arte. En los primeros tráilers, veíamos que el concepto en general del juego apuntaba hacia un estilo visual mucho más realista, alejándose un poco de todo este tema un poco más de dibujo animado tipo cómic que lucían sus antecesores. Dicho asunto me daba temor porque no quería que Arkham Knight se sintiera como parte de otra franquicia, y a pesar de que al final, el sesgo sí es hacia lo realista, la verdad es que jamás se perdió la línea original. Esta entrega se siente como parte de un todo.

Combate perfecto y complejo Predator Mode

Los cuatro juegos pasados de la serie se basaban en dos principales pilares. Por un lado teníamos el tema del combate, mismo que gracias a la tecnología del Freeflow Combat System, se convirtió en toda una revolución cuando Asylum se lanzó. Muchos han criticado a dicha mecánica de juego, incluso se le ha llegado a comparar con Quick Time Events.

En mi opinión, la comparación está completamente fuera de lugar, pues al menos en los Batman, no basta con apretar cierto botón predefinido y anunciado para tener éxito en las batallas, esto debido a que tenemos completamente libertad de mover a nuestro personaje hacia cualquier zona del área en la que nos encontremos peleando, esto sin mencionar que conforme avanzas en los juegos, se te van introduciendo nuevos enemigos que requieren de ciertas combinaciones y timings específicos para poderlos derrotar. Repito, aquí se nos da la oportunidad de decidir cómo resolveremos cada escena de acción a mano limpia, no como ocurre en los polémicos QTE.

Obviamente, en Arkham Knight este tipo de combate está de regreso de la mejor forma. La manera en la que combatimos con el caballero de la noche jamás se había sentido de una manera tan fluida, limpia y orgánica. Sentirás en carne propia cómo es que cada golpe conecta con los enemigos, mismos que fueron repensados, incluyéndose variaciones muy interesantes como el médico, el cual, tiene la capacidad de reanimar a sus compañeros caídos. Específicamente este nuevo tipo de contendiente hace que tus prioridades en combate cambien. Recomiendo ampliamente que pongas la dificultad en Hard, sobre todo si ya tienes experiencias con estos juegos, de verdad no te arrepentirás; cada combate se siente mucho más intenso.

El segundo gran pilar que sostenía a la franquicia era el Predator Mode. Hablo de estas zonas en las que Batman debe terminar con un grupo de enemigos con armas de fuego u otro tipo de amenazas, sin ser detectado. Dichas partes se convertían en un tipo de puzzle que debíamos resolver con la cabeza y no con los puños. Sabiendo perfectamente que en termino de controles, lo anterior simplemente no se podía mejorar más, Rocksteady tomó una decisión más que acertada y se fue por sofisticar el diseño de niveles.

Te puedo decir que a pesar de que andar con Grappling Hook colgando de un ladro al otro sigue siendo efectivo en este tipo de situaciones, no siempre será la mejor idea. Además de que la inteligencia de los enemigos fue mejorada de manera considerable para encontrarnos rápidamente y no olvidar tan fácilmente nuestra última posición, la forma en la que fueron construidos los escenarios es mucho más compleja.

En los pasados juegos de la saga, veíamos que en las áreas en las que era necesario acabar con nuestros adversarios sin ser detectados, se apostaba por presentarnos niveles muy verticales llenos de lugares para que Batman escapara. En Arkham Knight, dicho asunto fue repensado casi por completo. Ahora, nos tendremos que mover mucho más de manera horizontal para ganar terreno, además de que normalmente, nos enfrentamos contra varios niveles de profundidad. Estos puntos hacen que el Predator Mode se sienta complejo, sofisticado, bien diseñado y lleno de adrenalina, sobre todo en la dificultad más elevada. Algo que vale la pena mencionar es que en la mayoría de los casos, los enemigos están armados hasta los dientes, por lo que solo basta con dar un paso en falso para que terminemos muertos.

Una adición interesante fue la barra de Fear, la cual, cuando se encuentra llena, nos permite acabar con varios enemigos de un solo movimiento sin que estos sepan qué los golpeó. A pesar de que esto puede sonar como algo un poco automático, la realidad es que se necesita de estrategia y buenos reflejos para ejecutarlo adecuadamente.

Sin temor a equivocarme, puedo decir que al menos en el tema de los dos elementos que llevaron al éxito a la saga, Rocksteady cumplió de gran forma al refinarlos sutilmente. Por supuesto que esto nos deja con la gran incógnita de hacia dónde es que pueda crecer la franquicia, pues nadie de nosotros podemos creer que esta será la última entrega.

Bruce Wayne no está solo

Batman puede ser el mejor detective -y según Homero Simpson científico- del mundo, sin embargo, una o varias manos extra le vienen muy bien para combatir al crimen en Gotham City. En esta ocasión además de contar con el apoyo indirecto de Alfred, Oracle y Lucius Fox, el excéntrico millonario tendrá el apoyo dentro del campo de batalla de Robin, Nightwing y por supuesto, Catwoman.

Estos últimos tres personajes aparecerán ocasionalmente en algunas misiones bien determinadas para combatir al lado del caballero de la noche. En esos momentos, podremos controlar a ambos para armar combos especiales. La verdad es que los cambios con el toque de un solo botón se siente dinámicos y bien pensados. Lo único que me hubiera gustado un poco más, fue que la forma en la que cada uno se controla, se sintiera un poco más diferente.

Los tres nuevos pilares

Hace unos cuantos párrafos te hablaba sobre los dos principales pilares que han sostenido a la serie de Arkham desde que inició con el maravilloso Asylum. A pesar de que Rocksteady pudo haber tomado el camino sencillo y tan solo mantenerse por terreno bien conocido, se decidió crear tres elementos que se sienten como nuevos soportes a toda la experiencia en general, mismo que la vuelven más sólida y por supuesto divertida en todo sentido.

Creo que lo más lógico es comenzar por lo evidente. Desde que la saga nació, habíamos estado soñando con el momento en el que se nos permitiera estar detrás del volante del legendario Batimóvil, asunto que gracias a Arkham Knight, por fin se hizo realidad. Por supuesto que más de uno estábamos escépticos ante la posibilidad de que el estudio desarrollador hiciera funcionar algo tan complejo, sin embargo, me alegra mucho decirte que no solo hicieron que funcionara, sino que convirtieron al vehículo de Batman en un nuevo personaje.

Vamos por partes. El Batimóvil se divide en dos modalidades principales. La primera de ella es en la que se comporta como un vehículo normal, es decir, cuenta con un acelerador y freno, así como con el famoso Afterburner para alcanzar velocidades sorprendentes en poco tiempo. Cuando tomas el control por primera vez del auto, te sentirás un poco extraño, sobre todo por la interfaz de los controles. La realidad es que después de un par de minutos, conseguirás tener completo control sobre la máquina, misma que se siente llena de caballos de fuerza que mueven un grueso blindaje. Las persecuciones son emocionantes y llenas de adrenalina. Los controles se pueden modificar por si crees que puedes diseñar mejores interfaces que Rocksteady.

La segunda modalidad es la de tanque. Con tan solo apretar el gatillo izquierdo, el Batimóvil se transformará con una preciosa animación en tiempo real en un vehículo con alto poder de fuego y con gran movilidad a baja velocidad. Con un botón disparas el arma principal para terminar con los drones blindados de Arkham Knight, mientras que con otro, activas una torreta no letal para neutralizar enemigos que se encuentran a pie. Otra interesante mecánica del auto en esta forma, es la capacidad de hacer un mini dash para esquivar ataques enemigos. La realidad es que a pesar de la falta de variaciones de amenazas cuando juegas estas secciones, resulta muy divertido acabar con cuanto enemigo se ponga enfrente. Ver cómo estallan las cosas con nuestros disparos es una maravilla.

Además de todo lo anterior, el Batimóvil puede ser manejado a control remoto por Batman. Dicho elemento añade gran flexibilidad al gameplay, pues convierte al vehículo en mucho más que un medio de transporte o arma, pues incluso nos sirve para resolver puzzles, mismos de los que hablaremos a continuación. En general podemos decir que la llegada del icónico auto de Bruce Wayne fue logrado de manera muy buena. Mención honorífica al gran diseño que tiene.

El siguiente pilar del juego tiene que ver con el tema de los puzzles. En entregas pasadas, habíamos sido testigos de cómo es que en algunas secciones, nos teníamos que detener por unos momentos para resolver cierta situación. La realidad es que estos puntos no eran tan complejos, cosa que ha cambiando mucho en Arkham Knight y que me sorprendió de manera importante. Desde las primeras horas de juego, rápidamente te darás cuenta de que ahora, no todo es abrirte camino a puñetazos y patadas, sino que habrá momentos en los que tendrás que usar la cabeza.

Además de los asuntos que tendrás que resolver con el pensamiento y con la ayuda del Batimóvil durante la campaña principal, se puso especial énfasis en el papel que juega el famoso Riddler en la nueva aventura del caballero de la noche. Dichas misiones especiales pondrán a prueba tu creatividad para usar todas las herramientas que tiene Batman a la mano, incluso hubo momentos en los que me sentía como en un cuarto de uno de los dungeons de The Legend of Zelda. Repito que sigo impactado por el enorme enfoque que Rocksteady puso sobre todo lo anterior, asunto que creo, tan solo hace que Arkham Knight sea un mucho mejor juego.

Como te decía, Batman es el mejor detective del mundo y como tal, debe resolver algunas escenas del crimen. En las pasadas entregas, dichas secciones se sentían como meros adornos muy bien diseñados para hacernos sentir que somos inteligentes, no obstante, para este nuevo título, se decidió darle mucho más profundidad a todo esto.

La forma en la que deberemos de buscar pistas es bastante variado, pues ya no solo se limita a escanear un área por ejemplo. La reconstrucción de escenas del crimen completas a través de hologramas está de regreso, más o menos como lo vimos en Arkham Origins, solo que en esta ocasión, tendremos que pensar un poco más para poder descubrir qué fue lo que pasó. De igual manera, hay secciones en las que tendrás que revisar videos de seguridad para inferir hacia dónde se mueve todo.

Te repito que dichas secciones a pesar de mantener la misma línea que vimos en los pasados juegos, se sienten mucho más interactivas y funcionales por diferentes razones. La verdad es que se agradece que estos momentos de estilo Noire moderno, estén de vuelta en una forma tan fresca y bien pensada. Por dichas razones, es por las que considero que este elemento debe ser tomado como el quinto pilar en cuanto a gameplay que sostiene a Arkham Knight.

Un mundo no tan grande, pero muy detallado

Al pertenecer al género de mundo abierto, resulta muy importante cómo es que el mapa en el que nos estaremos moviendo fue diseñado. En esta ocasión, Rocksteady se volvió a superar. De primera instancia te puedo decir que si estas buscando un mundo titánico en extensión como lo que vimos en The Witcher 3 o Skyrim, lo mejor será que voltees hacia otro lado, pues Arkham Knight persigue objetivos muy distintos.

Después de haber recorrido Arkham Asylum y haber conocido una pequeña parte de Gotham en Arkham City y Origins, es momento de que exploremos a placer la famosa y muy peligrosa metrópoli. El mapa de Arkham Knight está dividido en tres islas principales, mismas a las que puedes acceder casi desde el inicio por medio del aire, mientras que el acceso por tierra, tendrá que ser desbloqueado conforme la historia avance. Su tamaño se siente como un poco más del doble de lo visto en Origins y Arkham City.

Como te comentaba, el estudio desarrollador en lugar de intentar emular algo como Grand Theft Auto V, se mantuvo fiel a lo que mejor sabe hacer, es decir, mundos no tan grandes pero perfectamente controlados y llenos de detalles. Gotham City luce fantástica tanto desde el aire, como cuando nos toca estar en sus calles. Ver cada letrero, edificio, callejón o escuchar las conversaciones de los maleantes o policías, es una verdadera delicia. Obviamente no te aburrirás, pues el mundo está lleno de actividades al azar que ocurrirán cuando paces por ciertas áreas, así como sidequests verdaderamente brillantes de los que te contaré en un momento más.

Sólida narrativa con emocionantes giros

La historia de Batman siempre ha sido uno de los elementos más importantes de todas las obras basadas en su universo. En cada entrega de esta amada franquicia se nos han contado relatos dignos de los cómics y películas más aclamadas, asunto en el que por supuesto, no ha quedado a deber en este nuevo juego.

Arkham Knight arranca unos meses después de los eventos de Arkham City en una noche de Halloween. Luego de que el temible Joker por fin fue derrotado por Batman para después ser incinerado, Gotham vive ciertos momentos de paz gracias a la reducción del crimen organizado en las calles. Asunto que por supuesto, está por cambiar radicalmente.

La trama general del juego me recordó mucho a lo que vimos en The Dark Knight Rises de Nolan, en donde la ciudad es tomada y amenazada con una temible arma. En lugar de Bane y su bomba nuclear, tenemos a Scarecrow, villano que está de regreso y que amenaza a toda la costa este de Estados Unidos con liberar su nueva toxina del terror que acabaría con la cordura de todos los habitantes y de la cual, se nos da una pequeña probada al inicio de la campaña.

Gotham ha sido evacuada casi por completo ante la amenaza y los pocos que se quedaron atrás, fueron dejados a su suerte por el exterior. Sumado a todo lo anterior, aparece un nuevo personaje que se hace llamar Arkham Knight, el cual, en un inicio, no se nos dejan claras sus motivaciones pero que a poco, se va tornando más interesante. Vale la pena mencionar que este villano es completamente nuevo y fue escrito especialmente para el juego.

Me encantaría poder hablarte mucho más de todo este tema, pero lo mejor es que vivas por ti mismo estos eventos. Lo que te puedo decir es que durante las dos primeras horas de juego, estarás brincando de la emoción por los inesperados giros que toma la narrativa. No, no se nos quedó a deber en este apartado. El cierre de la historia de esta saga es épico y por de más emotivo. Prepárate para una de las mejores historias que se nos han contado en este año.

Sidequests que te harán vibrar

La campaña de Batman Arkham Knight es una verdadera maravilla, sin embargo, tenemos que hacer especial mención a los famosos sidequests, mismos que cada vez toman más fuerza dentro del género. Para esta entrega, el formato ha cambiando un poco y a pesar de que al principio me generó dudas, la verdad es que la decisión tomada fue más que correcta.

Dentro de la interfaz tendremos un apartado especial para nuestras misiones activas. En ella, podremos ir viendo el progreso que tenemos en cada una de ellas. Cada uno de los sidequests está dividido en varias partes que irán apareciendo conforme avancemos en la historia principal. Como con la narrativa, lo mejor es que cheques por ti mismo estos elementos, pues te sorprenderás a cada momento, sobre todo con la variedad de gameplay que nos presentan. Solo diré que cuando me encontraba investigando un incendio en el departamento de bomberos y momentos después, estaba persiguiendo a uno de los épicos villanos que vimos en Origins.

Una enciclopedia de Batman

Una de las cosas que más gustan de los juegos de Arkham es que además de ser brillantes en sus mecánicas, son un gigantesco tributo a otros medios en los que hemos visto al caballero de la noche. Arkham Knight regresa con las biografías detalladas de cada uno de los personajes que se cruzan en nuestro camino, así como una extensa galería de arte conceptual que se agradece.

Como te comentaba, los easter eggs están en cada esquina, por lo que si eres fanático de Batman y en general del universo de DC Comics, varias sonrisas se dibujarán en tu rostro en cada uno de los momentos en los que nos encontremos explorando las peligrosas calles de Gotham.

Los malditos problemas técnicos

Dicen que ningún juego es perfecto y por desgracia, Batman Arkham Knight no se salva de esta especie de ley. Como normalmente pasa con los juegos de mundo abierto modernos, los bugs y glitches están a la orden del día.

A pesar de lo increíblemente bien que luce el título, es posible ver cómo saltan algunas texturas cuando estamos planeando. Otro punto negativo ocurre con algunas físicas del juego, sobre todo cuando entra la animación en cámara lenta al momento en el que terminamos con un grupo de enemigos.

Lo anterior no rompe la experiencia ni mucho menos, pero es algo un tanto molesto. También llegue a experimentar algunas caídas en el frame rate. Repito, lo anterior se debe resaltar, pero en general, no afecta lo muy bien construido que está el juego. Seguramente los retrasos que sufrió tenían que ver justamente con todo esto.

Rocksteady dejó la barra por las nubes

Batman Arkham Knight es un videojuego brillante por donde se le miré. Rocksteady nos deja claro el dominio que tienen sobre la fórmula que estableció hace unos años. Lo más loable es que a pesar de lo anterior, el estudio tomó algunos riesgos con el objetivo de entregar la experiencia definitiva de la saga. Cuesta trabajo encontrar razones de peso para no recomendar este juego para todo el que disfrute de este medio en general.

Si eres fanático del caballero de la noche y por supuesto de la serie Arkham, esta es una experiencia que simplemente no puedes dejar pasar. Sus brillantes mecánicas de juego, asombroso diseño de niveles, historia memorable y adiciones muy bien pensadas, hacen que sin lugar a dudas, Batman Arkham Knight se sume a la carrera por el título de Juego del Año.

Recuerden que también pueden escuchar nuestras impresiones y el debate en el Mini Podcast que grabamos aquí:

MINI PODCAST: BATMAN ARKHAM KNIGHT