Reseña: Dungeon Defenders (XBLA)

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Vayamos directo al punto. Si estás buscando jugar Dungeon Defenders de manera solitaria, es mejor que ni te molestes en descargarlo. No es que el juego sea malo en esta modalidad, sino que es algo lenta y se torna extremadamente difícil muy rápidamente. Dicho eso, si eres fan de los juegos cooperativos, entonces puedes estar listo para pasarla de maravilla.

En este título descargable creado por Trendy Entertainment tomas el papel de uno de los cuatro héroes sin nombre en entrenamiento, quienes tienen que cuidar una fortaleza mientras los héroes verdaderos se encuentra en una aventura. Hace algunos años, los héroes salvaron al mundo al encerrar al mal dentro de unos cristales, pero los años han pasado y al parecer los cristales no parecen ser suficientes y muy pronto la fortaleza se ve invadida de enemigos.

Dungeon Defenders
toma la formula de Tower Defense y te pone en medio de la acción. El juego también toma elementos de varios géneros como el RPG y el modo de Horda visto en varios FPS, y te pone a matar enemigos, recolectar objetos y subir de nivel a lo largo de varios escenarios donde tu deber es proteger los cristales de los ataques venideros. Ya sea que juegues como el Caballero, el Aprendiz, el Monje o la Cazadora, tendrás el tiempo suficiente para prepararte y poner trampas para el asalto que ya se encuentra tocando la puerta.

El acabar con los enemigos y sobrevivir a olas enteras de ellos te dará experiencia para subir de nivel y colocar tus puntos de habilidades en seis diferentes estados. El matar a los mismos enemigos y abrir cofres también te gratificará con armamento que te ayudará a mejorar tu estatus aún más. Puedes tener hasta cuatro jugadores al mismo tiempo jugando de manera local u online. La mejor apuesta es tener a un personaje de cada clase, aunque esa decisión dependerá de ti y de tus compañeros.

Cada una de las clases se juega de manera diferente y a pesar de que seguramente encontrarás ventajas en ellas dependiendo de la situación, cada una es bastante balanceada en términos de utilidad. No hay límite de cuántos personajes de cada clase puedes usar, pero es mejor tener variedad en el campo de batalla. Dicho eso, las ofertas de cada clase pueden funcionar sin importar la situación. El Caballero es lento pero tiene mucha vida, lo que le permite entrar en la batalla sin mucha preocupación. El Aprendiz es un mago con torres ofensivas que utilizan varios elementos para incrementar el daño. La desventaja es que algunos enemigos no tienen inmunidades a ciertos elementos, por lo que para rectificar esto, el Aprendiz tiene un bloqueo que puede eliminar la afinidad elemental de aquel al que dicho bloqueo golpeó.

El Monje es bastante rápido e inflinge gran daño en el combate cuerpo a cuerpo. En lugar de usar torres, establece auras en el campo que les otorgan buffs a los aliados y debuffs a los enemigos que caminan a través de ellas. En cuanto a la Cazadora, es la única clase con diferentes tipos de armas, desde mini-pistolas hasta ballestas. También es capaz de esparcir trampas en lugar de torres con vida. Ella es la mejor para usar en caso de que tengas la intención de hacer grandes cantidades de daño a grupos grandes de enemigos.

A pesar de que Dungeon Defenders apenas cuenta con gráficos excepcionales en términos del número de polígonos, la dirección artística es de primera, consistente y superior. Nunca puedes adivinar lo que estás viendo en la distancia. Cuando lo ves de cerca es cuando te das cuenta de lo que es. Los modelos de los personajes están decentemente animados y tienen la suficiente personalidad en sus acciones para que su estilo tierno tenga oportunidad de brillar. El pequeño baile que cada clase hace al final de cada ola de enemigos es encantador y hace que cada victoria sea aún mejor. En general, la retroalimentación visual es simplemente buena. Los menús son fáciles de navegar y lucen bien. El sonido, por otra parte, es algo carente y para nada memorable. No es terrible, pero no esperen tararear las canciones después de dejar de jugar.

También existen algunos problemas al jugar solo. Eres capaz de cambiar de clase durante la fase de construcción de torres al ir a la herrería de los héroes, pero el tener que ir y venir a cada rato hace que el ritmo de juego sea muy lento. Además de eso, no hay muchos detalles a remarcar en cuanto a la experiencia que el gameplay ofrece. Si eres realmente bueno con el posicionamiento de tus torres, puedes jugar todos los mapas como si se tratara de mapas básicos de defensa con torres, pero si prefieres ensuciarte las manos y hacerte cargo directamente de las masas venideras, el combate funciona bastante bien. Es muy simplote y picar botones a lo loco es suficiente para ganar.

El trabajo en equipo y la comunicación son las claves para salir victorioso, en especial en las dificultades más altas. Una vez que hayas terminado todos los niveles, también existen misiones de reto que van desde no usar torres hasta sobrevivir olas de enemigos explosivos. Estos retos también tienen sus opciones de dificultad, así que no creas que te quedarás sin contenido muy pronto. Entre cada una de las misiones, te encontrarás a ti mismo en una taberna donde podrás vender equipamiento y quizás hasta consigas comprar una mejora.

El juego tiene un costo de 15 dólares en cualquier de las plataformas en donde se descargue. Por ese precio, puedo decir que puedes esperar mucha diversión, aunque no hay mucho más que decir. El juego realmente ofrece mucho contenido y es bastante balanceado, además de que se nota que se le puso mucho amor en él. Como en cualquier título en línea, el kilometraje puede variar, pero si encuentras a cuatro amigos será difícil que te topes con un juego cooperativo que sea aún más divertido. Las balanceadas pero a la vez únicas clases, la variedad de modos, el replay value, el poder adictivo de levelear a cada uno de los personajes y los niveles bien diseñados, todo viene en un paquete que es difícil de superar.

Calificación: 8.5